Área 11
Ciudad Real
Un gol del capitán majariego Rubén, en el minuto 42 de partido, terminó condenando al Yugo Socuéllamos tras un partido en el que los manchegos mostraron fortaleza defensiva pero muy pocas alternativas en ataque. Y cuando tuvieron opciones, como en la media hora inicial, toparon con un extraordinario Miguel Ángel bajo los palos.
La derrota en Majadahonda complica mucho la permanencia para el Socuéllamos, que, a falta de tres jornadas, está a cinco puntos del “play out”, el último clavo ardiendo al que agarrarse.
Buen comienzo
El partido arrancó bien, sin sobresaltos en ninguna de las dos porterías y diez minutos iniciales en los que el mediocampo del Socuéllamos manejó la pelota con fluidez y controló tanto el partido como a su rival. Fruto de ese control llegaron sus primeras acciones de peligro. A los once minutos una falta al borde del área majariega la estrellaba Zurdo en la barrera.
Solo cinco minutos después, el central Alcañiz remataba de cabeza un córner botado desde el costado izquierdo al que respondía el portero majariego con una extraordinaria parada. El equipo de Cabezuelo dejaba constancia de su peligro a balón parado. Estas dos acciones despertaron a los locales y a su técnico, Antonio Iriondo, muy recordado por tierras manchegas, que varió su linea de cinco en defensa subiendo a Rubén al medio campo, donde hasta ese momento Salva y Ramón se manejaban con soltura y controlaban el “tempo” del partido.
A partir de ahí, el fútbol del Yugo comenzó a evaporarse en la misma proporción en la que creció el fútbol del Rayo Majadahonda, a pesar de lo cual, en el minuto 25, de nuevo a balón parado, el Socuéllamos dispondría de su segunda gran ocasión cuando Ramón ganaba la espalda de la defensa y remataba de cabeza una falta frontal. Su testarazo llevaba olor a gol pero de nuevo Miguel Ángel, el mejor de su equipo en la primera mitad, volaba para desviar a córner. Ahí se acabó la proyección ofensiva del Socuéllamos, cuyo portero, Saavedra, apenas tuvo que sacar un tímido despeje de Ñoño a lo largo de 40 minutos. Sin embargo no fue capaz de detener la jugada que terminaría por condenar al Yugo. En el minuto 41 de partido Carlitos recortó en el área ante la salida de Alcañiz y su centro lo remató Rubén de manera inapelable ante las miradas de Muñoz y del propio Saavedra.
El segundo tiempo arrancó con un Socuéllamos más decidido. A los cinco minutos Cabezuelo Rojo hizo un doble cambio. Con Nanclares y Cortell el equipo ganó en proyección ofensiva y generó veinte minutos de buen fútbol y máxima intensidad. Los majariegos sufrían y entre los minutos 18 y 30 el Yugo dispuso de tres ocasiones que ni Cortell (minuto 18) ni Kike Domínguez (25) ni Álex Cortell (30) supieron materializar.
El Rayo Majadahonda esperaba las contras para matar el partido, pero en la más clara de todas se estrelló con la “mano” de Saavedra.
Última oportunidad
La última opción del conjunto manchego llegó en el minuto 38, cuando Cortell atrapó un balón en carrera. Su intento de recorte lo adivinó el central Oliva para robar la última opción de ataque visitante y sellar así la derrota del Socuéllamos.
Con ese 1-0 terminó un choque en el que el Yugo pecó de temerosidad en la primera parte y que mostró sus principales bazas a balón parado. La derrota deja al equipo tocado… pero no hundido.
Rayo Majadahonda: Miguel Ángel, Aitor Núñez, Villalón, Oliva, Portuga; Rubén, Cidoncha, Carlitos (Álvaro Fidalgo, 92´), Ñoño (Parla, 82´), Portilla; Jorge Félix.
UD Socuéllamos: Saavedra, Carlos García, Zurdo, Alcañiz, Ramón (Franch, 78’), Salva, Óscar Martín (Álex Cortell, 50’), Jesús García, Belencoso, Manu Miquel (Nanclares, 50’) y Kike Dominguez.
GOLES: 1-0 (42´): Rubén..
ÁRBITRO: Navarro Collados (colegio valenciano). Mostró cartulinas amarillas a Cidoncha, Rubén y Oliva por parte del Rayo Majadahonda y RAmón, Salva, Manu Miquel y Kike Domínguez.
INCIDENCIAS: Cerro del Espino. 600 espectadores, unos 75 seguidores manchegos en la grada.

