Jorge Ureña
Ciudad Real
Pablo Buendía, defensa del Socuéllamos, todavía inédito esta temporada por una serie de problemas de lesiones, operaciones y recaídas, sigue apurando los plazos para su recuperación definitiva mientras analiza la situación de su equipo con cierta preocupación pero con la seguridad de que su equipo saldrá de la zona de descenso (actualmente está a tres puntos de la salvación).
El central del conjunto socuellamino comenzó la pretemporada con una rotura fibras y cuando empezó a recuperarse tuvo que pasar por quirófano para operarse de los meniscos. Aquello fue un 29 de septiembre y tras pasar por la pertinente recuperación, el jugador volvió a entrenar y, narra en conversación con Lanza, “al principio todo iba bastante bien, pero después se me inflamaba no se si porque entré antes de tiempo o si las cosas son así después de una operación de este tipo. Ahora me están infiltrando factores de crecimiento para regenerar el cartílago y estoy con la readaptadión intentando que no sea tan brusca entrando poco a poco en los entrenamientos”.
Lo dice un jugador que lleva toda la temporada en blanco, sin poder jugar con su equipo y con unas ganas enormes de poder echar una mano. “Encima, tal y como están las cosas, peor porque si estuvieran las cosas más deshaogadas estaría más tranquilo, aunque tu estuvieras fastidiado se llevaría mejor, pero si ves al equipo que está necesitando ayuda se pasa mal porque, por ejemplo, esta semana va a estar complicado hacer la convocatoria”.
Así que el central continúa trabajando para poder estar a disposición del entrenador cuanto antes. “Voy haciendo parte de los entrenamientos. El lunes que viene tengo la segunda de tres infiltraciones y espero cuando haga el reposo del pinchazo en dos o tres días empezar a entrenar porque lo necesito. Mi estado físico no es el idóneo pero gracias al preparador físico que está pendiente no he cogido nada de peso que es lo primordial”.
Mientras llega el momento del debut, Buendía analiza el momento de un equipo, al que, cree “le falta creerselo. Cuando hemos jugado con cabeza, pidiendo la pelota y pensando que no somos inferiores a nadie hemos estado bien. Luego algunos errores individuales nos han hecho perder puntos y eso se debe mejorar porque alquier fallo en esta cateoría te cueta un gol, pero lo importante es que el equipo está creando ocasiones de gol y entre todos haciendo lo que nos dice el míster vamos a ir para arriba”.