Hay proverbios lapidarios que se reproducen como mantras en multitud de conversaciones. Uno de ellos reza: ‘A quien madruga, Dios le ayuda’, que incide en la importancia de ser rectos en nuestro quehacer cotidiano y, por supuesto, en no dejar para mañana lo que puedas hacer hoy. Pepe Berja debe sentirse cómodo en ese planteamiento vital, o eso parece.
Por ejemplo, ningún equipo ha sido tan madrugador a la hora de confeccionar su plantilla, comenzando por él mismo. La particularidad es que los fichajes llegaron antes que las renovaciones. Siete refuerzos encaminados a dar un brinco y aligerar el lastre que el equipo arrastró con enorme sacrificio durante tres cuartos largos del último curso. Defensa y ataque son los dos bloques donde más interés se ha puesto. La llegada de Jesús de la Hoz cubre un puesto de lateral zurdo puro que el equipo no tenía. Jonathan Garceso viene a mejorar el eje central de manera inequívoca, donde la competencia será especialmente dura con gente como Sancho, Juli o Diego Sevilla. Por la derecha, el joven Víctor Manuel Torres debe ofrecer frescura y alegría a esa banda, en la que también pueden operar Josema, Mini o el mismo Juli.
La munición arriba debe aumentar sustancialmente. Douglas y Luque son dos extremos de gran experiencia y demostrada calidad. El primero llega con hambre en su vuelta a La Mancha y el segundo lo mismo tras un año frustrante en Tomelloso. Junto a ellos, Richi es la gran incógnita. Una apuesta personal de Berja hacia un futbolista que necesita adaptación y cuya explosión en Tercera está por ver. Y, por supuesto, Miguel Fuentes, el gran killer que el año pasado conquistó La Moheda y su renovación ha sido una de las mejores noticias posibles.
El centro del campo tiene variedad y versatilidad, aunque no ha habido incorporaciones de relieve más allá de que jugadores como Douglas puedan ayudar en la organización del juego. Pirri es el faro en la salida del balón. Un futbolista de muchos quilates capaz de pausar y generar, que tendrá al lado jugadores de más músculo como Diego Sevilla, Juan Santos y, cómo no, Almarcha, el clásico apagafuegos que todo entrenador desea en el campo y que, además, tiene bastante llegada. Falta saber cómo rendirá Raúl Delgado, cuyo talento es tan enorme como su facilidad para lesionarse. Y cómo no, David Sevilla, el verso suelto del que siempre se esperan grandes cosas en el juego de media punta.
Queda saber cuál será el patrón de juego amarillo esta temporada. El cuaderno de Bitácora del míster estará preñado datos, variantes y opciones. Conviene recordar que lo que dijo en su primera entrevista: “Mi apuesta es por un fútbol vistoso, de ataque donde mi equipo busque la meta contraria constantemente”. Obvia decir que habrá construido el equipo en base a ese modelo.
El nuevo inquilino del banquillo de La Moheda también será de los primeros en arrancar el motor de la pretemporada al frente de su nuevo equipo. Este sábado, día 20, el CF La Solana comienza a entrenar. Y, por si fuera poco, lo hará temprano, a las diez de la mañana. Y el domingo también, a la misma hora, con la fresca. Pepe Berja, ‘el madrugador’.
