Raúl Fernández
Ciudad Real
El ‘Manuel Trujillo’ acogerá este domingo el gran partido de la jornada 21 en el Grupo XVIII de Tercera División. El Almagro, cuarto clasificado y en puesto de play off de ascenso, recibirá a las 16:30 horas al Conquense, segundo de la tabla y que comparte coliderato con el Azuqueca.
Para el Almagro este encuentro será una gran prueba para sí mismo de cara a carburar su nivel y sus opciones de pujar hasta el final por ese sueño de la fase de ascenso. Ganar, sin duda, significaría creer todavía más, de ahí que para Darío, el técnico encajero, este partido “no necesita una motivación extra en los jugadores”. “Tenemos muchas ganas de ganar por nosotros, por nuestra afición y porque en el partido que jugamos allí ellos nos pasaron por encima, fueron muy superiores (venció el Conquense 5-2)”, explicó un técnico que se encuentra convaleciente al sufrir el pasado sábado en su trabajo un esguince de tobillo, de ahí que esté entrenando con muletas y tenga, probablemente, que acudir con ellas este domingo al banquillo.
Para Darío esa motivación extra que supone jugar ante el Conquense “tiene que repercutir en los jugadores con una actitud muy positiva. Queremos demostrar que podemos ganar a un equipo que no ha perdido todavía esta temporada fuera de casa y sólo ha encajado tres goles”. Con respecto al conjunto de Cuenca, Darío opinó que “ellos saben que este partido no va a ser igual que el de la primera vuelta y vendrán aquí con respeto”. En este sentido, el entrenador encajero quiere que su equipo “marque el ritmo. Estamos muy preparados para este partido y creo que nos llega en buen momento”.
El Almagro arrancará esta 21ª jornada en puesto de play off, pero en el seno del vestuario almagreño se mantiene la habitual prudencia: “Es bueno que la afición se ilusione, pero nosotros seguimos con humildad”, expresó finalmente Darío.