Puede que en el deporte todo sea demasiado efímero, que los proyectos se midan por los resultados más inmediatos y que el punto de mira se pierda en esa necesidad de la tranquilidad que da el triunfo el fin de semana. El Manchego, como todos, vive también de esa urgencia de lo inmediato, pero quiere ser un equipo que crezca y se consolide en el tiempo.
Le está costando al conjunto ciudadrealeño encontrar los resultados y eso está intranquilizando a la grada, viendo que los rivales de arriba se escapan en la clasificación y que los suyos se encuentran más cerca de luchar por escapar de los últimos puestos que de luchar por un play off que a estas alturas debería ser lo de menos.
Sin embargo, la realidad es que el grupo está unido y convencido de que esta situación es anecdótica y que será pasajera si consiguen transformar el trabajo diario en resultados.
Esta semana, como las últimas, ha sido de hacer piña, de crecer como grupo, de mirarse a los ojos y convencerse de que pueden revertir lo que se está haciendo. Insistía la pasada semana el técnico, Dani Giménez, que el equipo está preparado, que tiene calidad y que seguro que en unas semanas estará al cien por ciento compitiendo.
El Manchego solo piensa en Azuqueca
De momento, toca medirse este fin de semana a Azuqueca, un rival de brega, de los que apuesta por el fútbol de toda la vida, sin inventos, sin figuras emergentes sobre una pizarra magnética bautizadas para nuevas posiciones que quieran cambiar la historia.
Será un rival que obligue a ponerse el mono de trabajo, que aprovechará cualquier resquicio para rascar puntos en el Poli y eso obligará al Manchego a un ejercicio de madurez como equipo. Dani Giménez, técnico del Manchego ha insistido en la previa en la necesidad “de ganar y de hacer goles, porque todo lo demás, las sensaciones que nos están dejando son buenas”.
Llegan igualados con 9 puntos, a solo dos del Marchamalo que marca los puestos de descenso. No deben obsesionarse los de Giménez con lo que puede pasar si no se gana, porque ese nerviosismo se nota en las piernas y se contagia en un público que debe ser determinante.
Para este partido, los mancheguistas recuperan a una pieza indispensable como Choche y añaden variantes a lo trabajado. Para Giménez, “es importante ir incorporando variantes para desatascar partidos. Los rivales nos van conociendo y es importante que cada semana podamos contar con variaciones con las que no cuentan para poder manejar los partidos”.
El Manchego se merece más, pero no basta con lamentarse cuando no salen las cosas, sino trabajando para forzar que cambie la situación cuanto antes, no como una casualidad, sino como consecuencia de lo anterior. En esta línea también se ha pronunciado uno de los veteranos de la plantilla como Rodrigo Gui. “Queremos meter gol, ganar el próximo partido con nuestra afición, porque sabemos que el trabajo está siendo bueno”.
En este sentido, ha finalizado, “estamos confiados y con muchas ganas de hacer las cosas bien y de salir de esta situación que venimos viviendo”.
Cerrar filas, como lo están haciendo, con José Juan Bedoya al frente, es el primer paso para demostrar el compromiso de todos los que conforman el mancheguismo, que están convocados este sábado a las 17:30 a las gradas del Poli, para vivir una nueva final, en la que todos son importantes.
Resultado en directo
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