Julián Amores cogió la presidencia del BM Caserío en septiembre de 2022. Estos dos años al frente y tras el ascenso a Plata, han sido con buenos resultados en esa categoría, el primero logrando entrar en el grupo por el ascenso a Asobal y este segundo metiéndose entre los cuatro que jugarán este fin de semana el play off por subir, además de entrar en la fase final de la Copa del Rey.
En estos días previos a esa fase de ascenso en Burgos, Amores reconoce tener «el gusanillo por dentro», porque «es una cita histórica para el club y para la ciudad, aspiramos a devolver la Asobal a Ciudad Real».
Además, el presidente asegura ponerse a reflexionar también en estos días y «es para estar contento y satisfecho. Para nosotros tiene que ser un fin de semana de alegría, de orgullo, de ir allí a Burgos a, entre comillas, dar esa envidia porque somos un club que lleva solo dos años en Plata y se ha presentado en una fase final de Copa del Rey y en esta fase final por subir a Asobal. Caserío es el que va allí con los ojos abiertos y con la ilusión de un niño en el primer día de escuela».
Julián Amores explica que en el último partido de liga, el del pasado sábado en el Quijote Arena que acabó con derrota ante el Alcobendas, le comentó a los jugadores en el vestuario que el objetivo estaba ya conseguido. «El objetivo sí que era involucrar a la afición, que se sientan orgullosos del equipo por su entrega, por la cercanía, que cada vez vayamos atrayendo más gente y que que ella se ilusione al ver un equipo honesto y humilde en la pista. A la vista de todos está que lo hemos cumplido y con creces».
En ese sentido, el máximo mandatario afirma que muchos aficionados están contactando con él mostrando sus intenciones de acudir a animar este fin de semana a Burgos, además de para informarse sobre el autobús organizado por el club para viajar y que se espera llenar. «La ilusión de la gente y de la ciudad va ha hacer que allí estemos bien representados y, sobre todo, orgullosos de este equipo», comenta.
«Como ciudarrealeño también y que siento que el club aporta a la ciudad, me siento orgulloso. Nuestra mayor satisfacción, la de todos, es que Ciudad Real se escucha y está en el candelero. Eso es muy bonito», concluye un presidente también ilusionado por poder ver al Caserío competir en una fase final por alcanzar la Liga Asobal.
