La selección española femenina de fútbol sala es, otra vez, campeona de Europa. Con una gran autoridad, por 1-5, se impuso a Ucrania en la final y revalidó los títulos logrados en 2019 y 2022. Las de Clàudia Pons no dejaron la más mínima opción a la sorpresa ante un rival voluntarioso y con calidad, pero que no encontró la forma de hacer daño y más cuando a los 11 segundos el partido ya se le había puesto cuesta arriba.
Fue el tiempo que tardó Dany en forzar el penalti al marcharse de Dubytska. Peque lo transformó arrancando de la mejor manera su partido 101 como internacional. Un tanto que reforzó aún más a las españolas de confianza, algo de lo que van sobradas. Suyas eran las ocasiones más claras mientras que Ucrania lo intentaba con disparos lejanos que se encontraban siempre con Silvia.
A los 10 minutos, Irene Samper metió tierra de por medio tras una cabalgada por la derecha. No tardó en llegar el único pero de España, las faltas. A falta de siete minutos para el descanso cometió la quinta, aunque consiguió aguantar sin provocar ningún doble penalti. Incluso, amplió más la distancia con el tanto de Ale de Paz, su tercero en unas finales.
El partido tenía poca historia ya y se confirmó en los segundos 20 minutos, que empezaron como los primeros, con un gol de España a los pocos segundos. Con sólo 25 en juego, Irene Samper hacía el 0-4. Con esa tónica transcurrió la segunda parte. La ventaja era demasiada para que Ucrania creyese en la remontada y España supo manejar el partido sin complicaciones.
Aún así, las ucranianas lo intentaron con el juego de cinco durante muchos minutos e incluso marcaron con un disparo lejano de Shulha, pero el título ya no se le podía escapar a España. Dany, por si acaso, hizo el 1-5 poco después. La guinda a un gran torneo de España.
