El Soliss BM Pozuelo consiguió dejar muy abierta la eliminatoria previa de la fase de ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola, después de perder el pasado sábado de solo en gol en el choque de ida disputado en la pista del Grafometal La Rioja. Por 22-21 cayeron las ‘Espartanas’, en un choque que arrancaron muy bien, con una gran primera parte (6-10 al descanso), y en el que fueron ganando de cinco tantos al comienzo de la segunda, pero después llegó la remontada de las de Logroño. De esta forma, la resolución se producirá el sábado en Pozuelo, en donde se decidirá el ganador que pasará a la fase final con dos plazas de ascenso en juego.
«La sensación que tuvimos tras el partido fue agridulce. Estamos contentos, porque fue un resultado bueno y la vuelta la jugamos en casa, pero viendo el partido y cómo se desarrolló, creo que pudimos haber ganado», sentenció el entrenador Eusebio Angulo sobre ese encuentro de ida. Precisamente sobre la remontada del rival, el técnico analizó que «sufrimos varias exclusiones seguidas y ellas lo aprovecharon con un 4-0 de parcial para meterse en el partido».
Aunque el objetivo marcado era ganar este primer partido, Angulo dio por bueno ese resultado de derrota mínima «porque salimos vivos de allí y no fuimos inferiores al rival. Por ello somos positivos y optimistas», indicó, a la vez que elogió la primera mitad de las suyas «en la que solo nos metió seis goles un equipo muy goleador como La Rioja».
De cara a ese grandioso partido de vuelta en el pabellón ‘Las Espartanas’ de Pozuelo y en el que se decidirá el pase a la fase final (sábado, 20 horas), el míster del Pozuelo asegura que «el pabellón se va a quedar pequeño. Queremos disfrutar y hacerlo lo mejor posible. Sabemos que será difícil ante un gran rival, pero si pudimos competir muy bien allí en su pista, también podemos hacerlo en casa».

