No sé cómo empezar. Mi amiga Beatriz Barrilero me ha pedido que, como trabajadora, madre de familia y deportista, hable de mi experiencia. La verdad es que debería ser ella, como trabajadora, madre de familia y deportista la que dedicara estas palabras, como un buen ejemplo que es.
Empecé ya mayorcita a integrar el deporte como uno de los motores más importantes de mi vida, aún no tenía hijos, entonces, no me resultaba difícil compaginar mi vida con el deporte, además de que el único entrenamiento que hacía era correr dos días en semana. ¡Sería por eso de no abusar y de que me fuera a lesionar! Ahora, entreno seis días a la semana y algún día doblo, ¿dónde está el emoticono de loca? jaja.
Entre 2006 y 2008 tuve a mis tres hijos. La cosa cambió y bastante. En cuanto me recuperé de los partos, no solo seguí corriendo, sino que también empecé a participar en carreras. Seguía entrenando dos días a la semana y no más de 10 kilómetros. Podía compaginar el trabajo, la crianza y el deporte. No demasiado mal, porque mi marido y yo siempre hemos compartido las tareas de casa y los hijos. El problema vino cuando mi marido se enganchó a correr, ¡fui yo la culpable! Entonces ya era más difícil. Siempre andamos, ahora me toca a mí, no ahora a mí y así; menos mal que tenemos a los abuelos que están encantados de echarnos una mano, y nosotros de que nos la echen, ¡benditos abuelos!
Los mejores recuerdos en esas primeras carreras eran cuando iban a animarme mi marido y mis hijos muy pequeñitos. Espero que algún día sigan nuestros pasos, es uno de los motivos por los que me gusta hacer deporte, intento inculcarles los beneficios que tiene, que son muchos (salud física y mental, relaciones personales, etc).
En 2012 hice mi primer triatlón, fue una experiencia buenísima, la bici y la natación también me vuelven loca, aunque para entrenar estas dos disciplinas, además de correr, se requiere aún más tiempo; pero como querer es poder, lo empecé a sacar de debajo de las piedras, madrugando muchísimo, al mediodía y por la noche a última hora, para, así, compaginar y no descuidar mi vida familiar y profesional.
Después llegó mi primer maratón, en Sevilla, allí me plantñe. Conocí durante mi entrenamiento a un grupo de corredor@s maravillos@s, con los que continúo entrenando. En el grupo de wasap que tenemos, nos llamamos “corredores madrugadores”. ¡Y tanto! A las 7:00 de la mañana, dos días en semana, salimos a correr; una locura, pero es estupendo, sobre todo cuando das con gente que comparte tus aficiones; y más en mi caso, y en el de otras muchas mujeres que, aunque no debería ser así, tenemos un poco de reparo a salir a esas horas solas, casi siempre es de noche.
Mi marido ya era socio del Quinto Aliento y me animó a formar parte de él. Al principio era de decir “si a mí me da igual pertenecer o no a un club, qué más da”; “¡cuánto me alegro de formar parte de él!”. A día de hoy, soy miembro de la directiva en la sección de triatlón. Tanto me gusta, que he enganchado a muchos compañer@s del club. Somos muy pocas chicas las que hacemos triatlón (por eso me he llevado algún que otro premio). Desde aquí, os animo a que hagáis triatlón, es un gustazo, de verdad; me apropio una frase que dice Fructuoso, un compañero del Quinto Aliento: ”¡Hazlo, y si te da miedo, hazlo con miedo!”,
En las competiciones, por lo menos a mí, me cuesta mentalizarme que mi único objetivo es participar en todo lo que se pueda en modo de “disfrute”, sin pensar en tiempos, ni en marcas. ¡No soy profesional del deporte! Entonces, me digo, vamos a disfrutar cada uno con lo que consiga. Es un poco difícil asimilar esto, sobre todo cuando te llega gente que hace ¡unas marcas, y unos tiempazos, y son como tú! O incluso mayores que tú, y dices ¿cómo es posible? Bueno, pues no pasa nada, yo creo que he conseguido superar esa envidia “sana” de no estar a la altura de esas personas y disfrutar, que es de lo que se trata, de estar ahí, participando en lo que te gusta.
Mis próximos objetivos son participar en otro maratón, todavía no he decidido cuál. Hice la de Madrid y me gustó mucho, igual repito, aunque antes tengo una deuda pendiente con la maratón de mi tierra, el Quijote Maratón, en el 2020 sería una buena fecha. ¡Suena bien! Hasta ahora siempre he participado en la Media también me gustaría participar en el triatlón olímpico de Valencia, han ido este año varios amig@s del club y me han puesto los dientes muy largos, así que tendré que probar, y lo haré, “y si tengo miedo lo hare con miedo”.