Paula Sevilla ya tiene cinco oros en campeonatos de España de atletismo en pista cubierta. La velocista de La Solana conquistó este pasado domingo su quinto título, el cuarto en la prueba de las 200 metros (2017, 2020, 2022 y 2023) más otro en los 60 metros (2021).
Todas esas victorias nacionales, cuatro de ellas consecutivas en los últimos años, han sido celebradas a lo grande por Paula, pero esta última ha sido para ella más especial por las circunstancias que envolvieron su participación en la pista de Gallur (Madrid). «Sí que ha podido ser el oro más emocionante, el más luchado, en el que he tenido que tirar más de cabeza que de cuerpo y con las rivales corriendo muy bien», sentencia.
Porque el pasado viernes, el día en el que se estrenaba por la tarde con la preliminar, Paula Sevilla se despertó con una fiebre alta. Era un resfriado que encendieron todas las alarmas y que llevaron a la atleta solanera a dudar de su participación en el campeonato. «No sabía si iba a poder competir, no podía descansar bien y sabía que no recuperaría bien en esos días», explica.

Pero Paula no quería dejar pasar un Campeonato de España, más todavía cuando su preparación había ido perfecta y sus entrenamientos indicaban que se encontraba en un excelente estado de forma. Por eso y pese a la contrariedad y las recomendaciones, decidió tomar la salida el viernes en la preliminar.
«Estaba bien de forma y me apetecía mucho correr. El objetivo era ya el de tratar de ir pasando las rondas, llegar a la final y ya en ella hacer lo que pudiera», señala. Así lo fue haciendo, a la vez que, como recuerda, se levantaba por las mañanas con ese temor a estar peor y tener que parar. Pasó a semifinales con una marca de 24.39 y el sábado, en ellas, pudo meterse en esa deseada final con 23.79. Esa meta inicial estaba cumplida.
Así corrió el domingo la prueba definitiva de los 200 metros, consciente esta vez de que si en otras finales era la gran favorita, ahora lo que solo tenía en mente «era dar lo máximo que tenía, llegar a meta y ya que saliera el resultado que fuera». Lo hizo en la primera serie para terminar con un tiempo de 23.59 y emocionarse, con lágrimas, nada más cruzar la línea de meta. «Me daba rabia lo que había pasado, hice la prueba y ya sentí que había terminado todo», cuenta.
Finalizó la carrera de 200 metros para ella, pero había que decidir todavía el título nacional tras la segunda serie. Y para dar más emoción a lo vivido por Paula durante todo el fin de semana, su compañera en el Playas de Castellón, Esther Navero, fue primera con el mismo tiempo de 23.59.
Hubo que esperar así unos minutos para conocer quién era la campeona, un tiempo que se hizo muy largo hasta que se hizo oficial que Paula Sevilla había conquistado un nuevo título. Fue por una diferencia mínima de cuatro milésimas, 23.581 de Paula frente a 23.585 de Esther. «Vi que había sido oro, lo pude conseguir», refleja con alegría la deportista provincial ese momento especial vivido a la vez que era entrevistada por los periodistas de Teledeporte.
Con la satisfacción de esa victoria tan peleada y sufrida, Paula Sevilla mira ya con mucho optimismo hacia la temporada al aire libre, con el reto este año del Campeonato del Mundo y de mejorar marcas, algo en lo que no ha podido pensar en este Nacional, pero que sí tiene en mente para la pista descubierta.
Ahora espera ya recuperarse bien de ese resfriado y podría participar esta misma semana, el miércoles, en el Meeting Villa de Madrid, corriendo en la distancia corta de 60 metros.