Ricardo Íñiguez ha presentado este miércoles su dimisión como entrenador del Viña Albali Valdepeñas, al que llegó tras la destitución de David Ramos el pasado mes de diciembre.
Tras una reunión con el presidente de la entidad, Luis Palencia, el entrenador valenciado ha decidido dar un paso al lado, presentado la dimisión como entrenador del conjunto vinatero.
Íñíguez ha dirigido al equipo valdepeñero en quince partidos, con un balance de seis victorias, tres empates y seis derrotas, la última este martes contra Peñíscola que ha sido el detonante de una decisión que provocará la elección del tercer entrenador en lo que va de temporada -sin contar la interinidad de Víctor Beas-.
Desde el club han agradecido su trabajo, deseándole «suerte en el futuro». Cabe recordar, que este viernes el equipo se desplaza a Anaitasuna para disputar la vigésimoprimera jornada de liga contra Xota. En estos momentos, a falta de que juegue Ribera Navarra su encuentro frente al Quesos El Hidalgo Manzanares el próximo 1 de marzo, los valdepeñeros tienen el descenso a 4 puntos, una distancia demasiado corta, dada la situación del equipo.
