Castilla-La Mancha será una de las regiones españolas que despedirá 2024 con déficit de su PIB, concretamente con un saldo negativo del 0,3%, según las últimas previsiones de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea).
En concreto, la Comunidad Valenciana, Murcia, Cataluña y Madrid serán las cuatro regiones que dirán adiós al año a la cabeza en déficit de su PIB, en el que van a incurrir la mayoría de las comunidades autónomas, siempre según estas previsiones.
Siguiendo estas estimaciones, nueve de las 17 comunidades terminarán 2024 con saldo negativo del PIB: Comunidad Valenciana (-1,8%), Murcia (-1,6%), Cataluña (-0,7%), Comunidad de Madrid (-0,5%), Castilla-La Mancha (-0,3%), País Vasco (-0,3%), Andalucía (-0,3%), Extremadura (-0,1%) y Castilla y León (-0,1%).
Por contra, ocho comunidades cerrarán el año con un saldo en positivo: Asturias (1,2%), Canarias (0,9%), Navarra (0,7%), Cantabria (0,7%), Baleares (0,6%), Galicia (0,4%), La Rioja (0,3%) y Aragón (0,1%).
Lo señala Fedea en un nuevo número de su Observatorio Fiscal y Financiero de las comunidades autónomas (CCAA), a cargo de José Ignacio Conde-Ruiz, Manuel Díaz y Carmen Marín, quienes analizan los ingresos y gastos autonómicos hasta julio de este año y hacen una estimación del saldo presupuestario autonómico a cierre del ejercicio.
En líneas generales, Fedea estima que el déficit de las comunidades autónomas acabará el año en el 0,4% del PIB, por encima del saldo negativo del 0,3% previsto por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIRef) y muy superior a las previsiones del Gobierno de equilibrio presupuestario, del 0%.
“Si se confirma nuestra previsión, no sólo sería un mal dato dado el crecimiento de los recursos que han tenido las regiones en 2024, más de 20.000 millones procedentes del Sistema de Financiación Autonómico (SFA) respecto a 2023, sino que se pondría en riesgo la senda de reducción de déficit del conjunto de las Administraciones Públicas anunciada por el Gobierno para este año”, avisa.
Y sostiene que con las nuevas reglas fiscales de la Unión Europea para el próximo año, “la consolidación fiscal en España no se puede demorar más”. “Debería ser una de las principales tareas que debe afrontar el Gobierno de España”, algo para lo cual “la participación de las CCAA debería ser fundamental, dado que esta administración supone la mayor parte del consumo público”, indica.
No obstante, Fedea precisa que su estimación de cara a finales de este año supone una “mejora” respecto al cierre de 2023, cuando el déficit autonómico en España fue del 0,9% del PIB.