Un camión cisterna que transportaba 25.000 litros de vino elaborado en la cooperativa SAT Coloman, ubicada en Pedro Muñoz, fue vandalizado la mañana del pasado 25 de enero por los agricultores franceses, dentro de las violentas protestas que mantienen desde hace una semana en las autopistas del sur del país contra los camioneros españoles.
El vehículo formaba parte del contingente de quince camiones que salieron el día 23 desde las instalaciones pedroteñas con destino a la región alemana del Mosela, una de los territorios de más tradición vinícola del país, donde la empresa ciudarrealeña tiene un cliente fidelizado.
Así lo ha explicado a este digital el gerente de la bodega, Casimiro Sanz, quien ha lamentado los hechos sufridos por el conductor del camión que transportaba su producto, al verse sometido por uno de los piquetes en la A7. “Lo rodearon, bajó, pero le dijeron que volviera a subir y vertieron toda la carga”, ha señalado antes de deplorar los problemas que han tenido que vivir los camioneros, retenidos en la frontera de La Junquera “y todo colapsado”.
Algunos de los conductores, ha señalado Sanz, decidieron optar por otras rutas, también con “muchos problemas” porque “no eran propias para camiones y no cabían en las rotondas ni en las calles”.
“Hay un gran caos”, ha indicado el empresario, según las informaciones que le llegan de los conductores que trasladan sus vinos, dado que aunque se ha rebajado la tensión este fin de semana, los productores franceses arreciarán, tal y como han anunciado, las protestas desde este lunes.
Ante este panorama, Sanz ha mostrado su preocupación por las consecuencias para la propia empresa, dado que “si se paralizan los envíos internacionales a Italia, Francia y Alemania, no facturamos porque no entra dinero a la bodega”.
Se pregunta cómo van a cumplir el contrato con el cliente alemán del Mosela, que había pedido medio millón de litros de vino.
El gerente ha empatizado con las reivindicaciones de los agricultores franceses, que ve “justas”, aunque ha llamado la atención por “la situación mucho más precaria de los viticultores de La Mancha, después de dos años de sequía y con la disminución de las dotaciones de agua para riego”.
Por todo ello, Sanz ha solicitado a las autoridades españolas, “el Gobierno o la embajada”, que protejan a los camioneros españoles, ya que los asaltantes galos están incumpliendo el principio de libre circulación europeo.
Por su parte, y a través de cooperativas agroalimentarias Castilla-La Mancha, “les hemos pedido que alzaran la voz porque no son hechos aislados, sino que se repiten, la última vez el pasado octubre”, ha recordado.
El Colegio Oficial de Enología de Castilla-La Mancha (COECLM), de su lado, también se ha solidarizado con las empresas vitivinícolas afectadas por los ataques franceses a los camiones de mercancías, especialmente de vino y fruta, que intentan cruzar los pasos fronterizos del país vecino.
Por ahora es el único caso de camiones de Ciudad Real que se conoce ha sufrido asaltos en el actual frente reivindicativo de Francia.
Bloqueo indefinido
Pero en Francia, el escenario sigue caldeado, ya que según han anunciado la Federación Nacional de Sindicatos de Explotaciones Agrícolas (FNSEA) y la asociación Jóvenes Agricultores de la Gran Cuenca de París, seguirá el bloqueo de los accesos a París “por tiempo indefinido” a partir de las 14.00 horas de este lunes 29 de enero.