No hay duda de que el futuro ya está aquí, y el comercio electrónico es la mejor muestra de ello. No es una broma que haya facturado unos 20.000 millones de euros en 2015 y que, según los expertos, esté creciendo en España a un ritmo del 20%. Esto no es, por supuesto, una casualidad, ya que el 79% de los hogares españoles cuenta ya con internet, superando ya a países como Alemania o Reino Unido, y el 30% de los españoles usa con frecuencia este medio para hacer sus compras.
Estas cifras, pasadas a personas significa que son 23 millones de españoles los que forman la conocida como “población online“, de los que 17 son, además, usuarios de las principales redes sociales”.
No es necesario insistir que son los menores de 40 años los más adictos a la red y, por tanto, aquellos a los que más se dirige el comercio electrónico. Otra cuestión es su poder adquisitivo. El grueso de los usuarios, que nacieron con Internet, suelen ser mileuristas, e incluso con salarios muy inferiores, lo que les obliga a seleccionar mucho los artículos que desean adquirir. Y ahí está otra de las virtudes del correo electrónico, la gran variedad de ofertas y posibilidades que la red ofrece.
Esto ha llevado también a la proliferación de empresas que se dedican a ofrecer alojamiento en Internet, páginas web y sus correspondientes garantías. Porque nadie puede poner en juego su dinero sin que el mercado online garantice que se va a recibir exactamente lo que se pide y al precio pagado. Normalmente, los servicios de hosting se ofrecen a través de páginas web corporativas como la de 1&1, las cuáles ofrecen un servicio de alojamiento web permitiéndole a las distintas empresas o incluso a individuos, subir y alojar los diversos contenidos.
Toda esta infraestructura informática y los servicios que prestan a sus usuarios como la la confianza, seguridad, variedad, o la rapidez ha llevado a que en estos momentos el gasto medio online de los internautas españoles haya alcanzado los 198 euros durante el primer trimestre de 2016, un 18% más que en 2015, que fueron 163 euros, y más del doble que en 2014 que se quedó en 146 euros.
En cuánto a los sectores de crecimiento, uno de los más utilizados es el turismo, de forma que el gasto medio en la reserva de alojamiento alcanza ya los 465 euros y la compra de billetes online los 700 euros. También está creciendo la inversión online en decoración pasando de 168 euros de media en el pasado año a 227 euros hasta marzo de 2016. Finalmente debemos señalar que una gran parte de las ventas se produce de manera muy estacionalizada, concentrado en fechas señaladas como Halloween, Navidad o carnaval, aunque se está notando una tendencia a la uniformidad a través de todo el año.