Los productores de Castilla-La Mancha y, por ende, los de la provincia de Ciudad Real, han recibido con expectación la autorización para usar los terrenos que la PAC obliga a dejar en barbecho -el 5 por ciento de la superficie de cultivo-, para aumentar la producción de cereales y girasol, y poder cubrir las caídas de abastecimiento en los mercados por la guerra en Ucrania. En el caso de la provincia, estos terrenos suponen unas 200.000 hectáreas, el tercio de las 600.000 hectáreas de la comunidad (a nivel nacional son 2,7 millones de hectáreas), según la Consejería de Agricultura, que una vez incorporados podrían multiplicar por cuatro la producción de pipa de girasol, y equilibrar su presencia deficitaria en la región.
Es una de las medidas acogidas con más entusiasmo por las organizaciones agrarias de todo el paquete aprobado el martes por el Consejo de Ministros para los sectores agrario y pesquero, con una financiación de más de 430 millones de euros.
La propuesta se enmarca dentro del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la invasión rusa sobre Ucrania, publicado con un Real Decreto en el BOE este miércoles, y supondrá que las tierras en barbecho -tanto Superficies de Interés Ecológico (SIE) como para la diversificación de producciones- se consideran un tipo de cultivo específico. Por ello, las tierras en barbecho que hayan sido pastoreadas, segadas con fines de producción o sembradas con cualquier otro cultivo estarán vinculadas, según el Ministerio de Agricultura (MAPA), al cobro de las ayuda del pago verde sin ningún tipo de penalización.
El sector además se beneficiará, ha señalado el MAPA, del conjunto de medidas en el ámbito energético (energía eléctrica, gas y energías renovables).
Asaja: atención a los contratos
El secretario de Asaja provincial, Florencio Rodríguez, ha avalado la nueva posibilidad de declarar y reconocer tierras de barbecho para cereales y oleaginosas, y solventar así parte de la crisis alimentaria derivada del conflicto bélico, y mejorar el suministro de estos productos.
Es una solución, ha sostenido, para aprovechar las explotaciones agrícolas productivas, incluso con regadío, con el objetivo de aumentar sus beneficios con el cierre de contratos que “garanticen una renta y un valor añadido”, tal y como establece la ley para tener “precios justos” en origen.
Menos atractivo será, en su opinión, el uso de tierras “más pobres y menos productivas” siempre dentro de las hectáreas “que tienen reconocidas” para la rotación con el SIE o la diversificación.
Rodríguez ha reconocido que el girasol, en concreto, es un cultivo que tiene menor peso en la provincia de Ciudad Real, frente a la mayor presencia en la provincia de Cuenca, aunque “depende de la voluntad de los agricultores”.
UPA: Incrementar la producción
Desde UPA, valoran, igualmente, las medidas para usar la superficie de barbecho de la PAC para oleaginosas, tal y como la organización ya había pedido a nivel nacional, además de relajar las exigencias del pago verde para incrementar la producción.
En concreto, se da cobertura a la solicitud que la organización realizó para eliminar la exigencia de sembrar al menos tres cultivos a los agricultores que tengan más de 30 hectáreas o dos a los que tienen entre 10 y 30 hectáreas, y también para permitir que el 5% de superficie destinada a los barbechos (zonas de interés ecológico) se pudiera sembrar de oleaginosas.
No hay que olvidar que el aprovechamiento de los barbechos con posibilidad de declararlo en la PAC será una elección de los productores.
COAG: Precios interesantes
En la misma línea, el secretario regional de COAG, Ángel Galve, ha señalado que “lo estábamos pidiendo”, pues “forma parte de nuestras reivindicaciones para favorecer al profesional”.
Para el líder agrario “era absurdo” mantener en barbecho el 5% de las tierras de cultivo por explotación, sin poder sembrar girasol, mientras “se está importando de fuera”. Por ello, y a pesar de su carácter transitorio, la posibilidad de aumentar la extensión de oleaginosas “es buenísima”, sobre todo “ahora en el actual escenario bélico, donde los precios son tan interesantes”.
