La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha sostenido este martes que seguirá «hablando y dialogando» con los grupos políticos «hasta el último minuto» para poder para poder llevar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2025 ante las Cortes Generales.
«Yo creo que es muy importante que el Gobierno practique política útil y esto significa que yo voy a seguir hablando y voy a seguir dialogando hasta el último minuto», ha afirmado en declaraciones a los medios en los pasillos del Senado.
Aun así, la titular de Hacienda ha puesto de relieve que el Gobierno ya ha dado paso para poder aprobar los Presupuestos y ha recordado que el Ejecutivo ya llevó «en tiempo y en forma» la senda de estabilidad a votación en las Cortes Generales, que es el primer hito presupuestario.
«El Partido Popular tumbó, con otros grupos, la senda de estabilidad», ha lamentado la ministra, tras señalar que, con este rechazo, se vetó tramitar 4.500 millones de euros más para las administraciones territoriales que proponía este Gobierno.
INCREMENTO DEL GASTO EN DEFENSA
En cuanto a la gestión del incremento del gasto en defensa requerido por Bruselas, Montero ha explicado que el Consejo de Ministros tiene capacidad de modificación presupuestaria, pero hay algunas cuestiones que requieren de rango de ley, por lo que el Gobierno tendrá que llevarlas ante Congreso de los Diputados.
Aunque la responsable de Hacienda ha trasladado un mensaje de «tranquilidad» sobre el contexto incierto que vive el mundo, sí considera que es importante que se fortalezca la defensa y la seguridad para hacer frente a «cualquier tipo de cuestión».
«En este momento quiero trasladar un mensaje de tranquilidad al conjunto de los ciudadanos, diciendo al mismo tiempo que estamos pendientes, que estamos alerta y que estamos trabajando por la paz», ha recalcado.
Montero ha expresado su preocupación también por «algunas voluntades» expresadas por la Administración norteamericana respecto a las barreras comerciales y a la puesta en marcha de los aranceles, «que evidentemente perjudican a sectores muy concretos».
«Europa se está defendiendo de algo que evidentemente no es bueno para nadie, ni para el que lo pone ni para el que lo recibe, y en este caso para mí, y particularmente para el Gobierno, protegiendo a los sectores que pudieran estar incorporados a esa decisión, por ejemplo el agroalimentario, que es tan importante para nuestro país», ha enfatizado.
