VidaCaixa ha cerrado 2021 con un beneficio neto consolidado de 793,8 millones de euros, un 6% más que en el ejercicio anterior, sin tener en cuenta el impacto extraordinario registrado en 2020 procedente del acuerdo de earn out de SegurCaixa Adeslas. El margen de explotación de la compañía ha crecido un 11%, lo que demuestra la buena salud de todas las líneas de negocio.
La entidad se ha mantenido por sexto año consecutivo como líder del sector asegurador en España con una cuota de mercado total en primas del 13,78%. Durante este ejercicio ha superado los 11.000 millones de euros de facturación y, por primera vez, ha alcanzado los 100.000 millones en patrimonio bajo gestión (sin contar BPI ni EPSV). Una oferta amplia e innovadora y la excelente gestión de las inversiones son las claves del avance en el beneficio.
Javier Valle, consejero director general de VidaCaixa, ha subrayado que «VidaCaixa ha mantenido unos resultados muy positivos en un ejercicio en el que hemos estado inmersos en la mayor integración bancaria de la historia en España y nos hemos enfrentado a un entorno desfavorable por los cambios normativos y los tipos de interés en mínimos. Nuestra gestora ha vuelto a conseguir unas rentabilidades por encima del mercado a través de una gestión responsable que afianza el papel estratégico de la aseguradora en el Grupo».
Los resultados marcan la recuperación tras la pandemia y la solidez del negocio de VidaCaixa, incluso ante un entorno regulatorio y económico adverso. Así mismo, VidaCaixa sigue enfocada en paliar los efectos económicos y sociales que ha causado el coronavirus. A través de la patronal aseguradora, ha participado en diferentes iniciativas en colaboración con organizaciones sin ánimo de lucro, entre ellas, y la más reciente, el acuerdo con Unicef para vacunar a 2 millones de personas contra la COVID-19 en países en vías de desarrollo.