IFEDI, el Ferial de la Diputación de Ciudad Real, lugar en el que este martes da comienzo FENAVIN, ha sido el lugar elegido por la Denominación de Origen La Mancha para presentar sus cuentas y dar a conocer las distintas modificaciones planteadas a sus socios.
El evento, además de con los 24 vocales del Consejo Regulador de la DO La Mancha y su presidente, Carlos David Bonilla, también ha contado con la presencia del presidente de la Diputación de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, la delegada provincial de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, Blanca Fernández, la delegada de Igualdad, Manoli Nieto-Márquez y el delegado de Economía, Empresas y Empleo, Agustín Espinosa.
Al respecto, Carlos David Bonilla afirmaba que “hemos trasladado nuestro pleno hoy aquí, a FENAVIN, al corazón de lo que va a ser la feria, para reforzar el compromiso de la DO con esta feria”.
En cuanto a la asamblea, en ella se ha informado a todo el pleno de lo que se ha hecho en los últimos seis meses en las tres comisiones. Bonilla ha calificado la campaña como “muy buena” y ha informado de las distintas modificaciones del pliego.

Modificaciones en la DO La Mancha
Entre las últimas propuestas de modificación del pliego de condiciones, Carlos David Bonilla ha destacado que la DO La Mancha ha solicitado a la Unión Europea la incorporación de la mistela como producto amparado bajo su sello, atendiendo a la demanda de distintas bodegas que desean elaborar este vino dulce con reconocimiento oficial.
Otros cambios relacionados con la adaptación a las nuevas tendencias del mercado son la rebaja del grado alcohólico mínimo, que pasaría de los nueve grados actuales a los 4,5 que proponen desde el Consejo Regulador. Así, aunque se mantendrían parámetros para la uva con grados a partir de 10,5 para los blancos y 11 para los tintos, muchos de los que hoy se consideran mostos parcialmente fermentados pasarían a considerarse vinos. Ambas modificaciones están pendientes de publicarse en el Diario Oficial de Castilla La Mancha, pero ya han sido aprobadas por lo que serán inminentes.
Además, ya está autorizado por la Junta, pero pendiente de aplicarse, la opción de hacer Blanc de Noirs, es decir, una modificación para permitir que, a partir de variedades de uvas tintas, puedan elaborarse vinos blancos. Algo que, en palabras de Bonilla, “responde a la demanda creciente de vinos blancos y al descenso de los vinos tintos”.

Pendiente de aprobación por la Unión Europea
Aparte de estos cambios, la Asamblea ha aprobado también la posibilidad de hacer Granvas con un solo mes de fermentación en vez de los seis meses que se necesitan a día de hoy. Al tratarse de una modificación mayor, aun está pendiente de ser aprobada por la Unión Europea. Sobre este cambio, Carlos David Bonilla explicaba que “el Granvas de calidad, por el envejecimiento en barrica, no nos hace competitivos a día de hoy al venderlo en el exterior”.
El sector del vino, esencial para la región
En ese mismo acto, la delegada de la Junta de Comunidades, Blanca Fernández, ha aprovechado para trasladar “el apoyo y compromiso del presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García-Page, que tiene muy claro que el sector del vino es esencial para la región”.
Fernández ha citado como máximo exponente de ello a la DO La Mancha, “la mayor denominación de origen de toda Europa en extensión, con datos tan impresionantes como los 920 millones en ventas”.

En este sentido, Fernández ha resaltado el “salto cualitativo” que ha habido en los últimos años en el sector vitivinícola en materia de calidad y marketing, mérito que ha atribuido a viticultores, cooperativas, bodegas y denominaciones de origen para ser a día de hoy un referente.
En el año 2024 el sector vitivinícola en Ciudad Real registró el mejor dato de exportaciones de la historia, con 447 millones de euros, lo que convierte a Ciudad Real en “el mayor exportador de Castilla La Mancha y los segundos en cuanto a facturación a nivel nacional”.
Por su parte, Miguel Ángel Valverde, ha querido poner en valor el trabajo que hace la DO La Mancha, tanto en el control y seguimiento de la trazabilidad y etiquetado, como en la promoción de sus vinos, que suponen un 5% del PIB del sector agroalimentario.
Valverde se ha referido asimismo a los retos y amenazas existentes en el sector, como el nuevo etiquetado del vino como bebida alcohólica, ante lo que considera que “las administraciones deben unirse y luchar por defender que el vino se trata de un alimento indudablemente beneficioso para la salud, así como parte de nuestras relaciones, identidad y patrimonio, absolutamente arraigado a nuestra historia”.