La Diputación de Ciudad Real llega a la Feria Nacional del Vino, el evento socioeconómico más importante que existe en la provincia, con los deberes hechos. Fenavin 2025 recibirá 1.922 expositores, 4.000 compradores internacionales de casi 100 países, y acogerá más de un centenar de actividades. Entre las novedades destaca un programa de visitas a bodegas, una carpa para la promoción de la provincia y un stand institucional para la Administración organizadora que aspira ser el epicentro del negocio. El presidente de la Diputación, Miguel Ángel Valverde, cree que la gran feria del vino español llega “más fuerte” que nunca.
“Llegamos a Fenavin, que se celebrará entre el 6 y el 8 de mayo en el Ifedi, con mucha ilusión de que las cosas salgan bien y de cumplir dos objetivos: mejorar la profesionalización de la feria para hacer más negocio y conseguir un mayor retorno económico en la provincia”, expresa el también presidente de la feria. Espera que la presente edición sea “mejor que las anteriores y peor que las que vengan en el futuro”, y hace referencia al esfuerzo realizado por todo el equipo de la Diputación, dirigido por Sonia González, en colaboración con la Cámara de Comercio y otras entidades.
La Diputación de Ciudad Real corre con el 90 por ciento del presupuesto de 6 millones de euros de inversión. A través de un convenio de colaboración, la Junta de Comunidades aporta en torno a 450.000 euros, “fundamentalmente en campañas de comunicación”, que se suman a los acuerdos con la Cámara de Comercio, el instituto de promoción exterior de Castilla-La Mancha ICEX y la fundación Tierra de Viñedos para la captación de compradores internacionales. También existen patrocinios privados, como Globalcaja que aporta 80.000 euros, y en menor medida La Caixa y BBVA.
Más expositores
El pabellón de la reconocida como “feria del vino español más importante del mundo” estará al completo, los 30.000 metros cuadrados. Valverde señala que en Ciudad Real “van a estar todas las comunidades autónomas y todos los territorios vitivinícolas, las denominaciones de origen y los grandes grupos bodegueros, indudablemente algunos con mayor presencia, porque tienen más importancia”. Son 15 expositores más que en la edición anterior y treinta marcas más en la Galería del Vino, uno de los símbolos de la cita comercial, donde se podrán catar 1.487 referencias.
De Estados Unidos a Asia
El número de compradores internacionales permanece estable: son cerca de 4.000, de los que más de 800 han sido captados a través de diferentes programas. En medio de la guerra arancelaria emprendida por Donald Trump a nivel internacional, Miguel Ángel Valverde confirma que “Estados Unidos mantiene el número de compradores, que incluso crece con respecto a la edición anterior”. Asimismo, en este contexto el presidente de la Diputación considera que puede ser un buen momento “para la búsqueda de nuevas oportunidades”.
La mirada está en Brasil y en Asia, en concreto en Vietnam y Tailandia, que han sido los destinos de las misiones comerciales impulsadas por la Diputación en los dos últimos años. “Estarán sobrerrepresentados con respecto al resto, debido a ese mayor esfuerzo por la captación”, señala Valverde, que hace referencia a que estos países emergentes “ven en el vino español no solo un producto de altísima calidad, sino un producto que detrás tiene un relato, una historia, una forma de contar”, como reflejarán diferentes actividades paralelas. También adelanta que por primera vez habrá presencia de estados “con renta per cápita muy alta, que muestran cada vez mayor interés por el vino español”, como son San Marino y Mónaco. “De forma llamativa” crecen hasta 19 los compradores italianos, pese a que su país es uno de los principales productores del mundo, y también estará Rusia.
Coexistir con la feria de Barcelona
Fenavin 2025 mantiene su carácter bienal y fecha, en mayo, pese a las especulaciones sobre su cambio por la competencia que ejerce la Barcelona Wine Week. Miguel Ángel Valverde afirma con rotundidad que “este año al menos no nos va a afectar”. “La feria de Barcelona ha ido creciendo en las últimas ediciones y, además, lo ha ido haciendo utilizando un modelo similar al nuestro, que es el de captar compradores internacionales. Pero creo que ambas ferias pueden coexistir”, afirma. A corto plazo, la Diputación no se plantea cambiar de fecha, pero sí valora diferentes posibilidades para que no se reduzca a un evento cada dos años.
Valverde plantea organizar otro evento «más reducido, pero que tenga relación con el negocio en torno al vino», para que así «no haya años en blanco»
El presidente de la Diputación avanza que una vez que termine Fenavin 2025 se plantearán organizar además otro “evento”, todavía por concretar, “más reducido, pero que tenga relación con el negocio en torno al vino”, para que así “no haya años en blanco”. “Cualquier decisión en torno al futuro de Fenavin habrá que planteársela una vez acabada la feria y viendo los resultados. De momento, la presencia va a ser similar a la de ediciones anteriores, la ilusión también, y creo que vamos a ser capaces de celebrar una feria que incluso mejore a las anteriores, no porque lo hagamos mejor, sino porque indudablemente llevamos mucho aprendido”, repite Miguel Ángel Valverde.
Reforzar la estructura de gestión de la feria
Otra de las cuestiones que tendrá que decir la Diputación cuando finalice Fenavin es la creación de un patronato u organismo autónomo para la organización de las ediciones futuras. Valverde advierte que este tema lo han aparcado “de momento” a la espera de la celebración de este año. Eso sí, admite que “lo que está claro es que tenemos que conducirnos y caminar hacia fortalecer la feria”, y entiende que eso “pasa por reforzar, como haría cualquier institución, la estructura de gestión”. El modelo está por definirse y está marcado por el hecho de que la dirección corre a cargo de una Administración pública como es la Diputación, con las ventajas e inconvenientes que eso conlleva.
«Tenemos que conducirnos y caminar hacia fortalecer la feria… y eso pasa por reforzar, como haría cualquier institución, la estructura de gestión»
A preguntas de Lanza durante la entrevista, Miguel Ángel Valverde asegura que la idea es abordar “con suficiente seriedad si es o no necesario conducirse a una estructura profesional más renovada, reforzada y permanente” de cara a 2027. Él cree que hay que avanzar hacia ese “reforzamiento” de la estructura profesional y, añade, que “eso no significa que la feria vaya a salir mejor o peor, sino que el trabajo para organizarla posiblemente sea más eficiente y, por lo tanto, requiera menos esfuerzo”.
El stand de la Diputacíon
Entre las novedades de Fenavin 2025 destaca el stand que tendrá por primera vez la Diputación, como ya lo hacen otras administraciones. “Nos va a permitir ejercer de anfitriones en una localización de la feria, al margen de los despachos y de la propia estructura del Ifedi, y también que las pequeñas bodegas de la provincia tengan un lugar donde realizar sus labores de comercialización, con el apoyo de todas las herramientas que necesiten e incluso de traductores”, explica Valverde. Además, la Diputación va a aprovechar el espacio para firmar “convenios y protocolos de colaboración” con la Embajada de China, India y Chequia.
Actividades paralelas
De forma paralela, la actividad de las empresas vitivinícolas de la provincia se va a reforzar con un nuevo programa de visitas a bodegas por compradores internacionales. Valverde señala que se han inscrito “53 importadores y 22 bodegas”. Es otra de las actividades vinculadas a la idea de que el comprador internacional “no solo quiere conocer el vino, su realidad y su precio, sino también la historia que hay detrás”. Los importadores se quedarán de esta manera unos días más en Ciudad Real, “lo que va a provocar mayores operaciones comerciales”.
La otra gran novedad, también paralela a Fenavin, va a ser la carpa de promoción de la provincia que estará en el exterior del Ifedi. Aquí, señala el presidente, “van a estar presentes todas las marcas de calidad reconocidas de Ciudad Real, las Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas, además de todos los territorios de la provincia a través de los Grupos de Acción Local”. Valverde considera que hay que aprovechar el tirón de “una marca tan consolidada como Fenavin” para “apoyar el conocimiento de la cultura, el patrimonio, la naturaleza y la gastronomía” a través del proyecto ‘Sabor Quijote’. “No se trata de mezclar, sino que es una alternativa paralela a la feria. Ya que tenemos una marca consolidada, vamos a utilizarla para que se puedan aprovechar otros sectores del territorio, insiste.
Ciudad Real, a la cabeza de la venta de vino
El retorno económico que produce Fenavin en la provincia no está cuantificado, aunque Miguel Ángel Valverde destaca que “lo que sí sabemos es que Ciudad Real en 2024 fue la primera provincia de España en cifra de negocio de vino embotellado, superando a Barcelona”. Para la Diputación esto quiere decir que “eventos como Fenavin contribuyen a mejorar el rendimiento comercial de nuestros productores vitivinícolas”. En 2025, esperan llegar a las “10.000 reuniones comerciales”, y que aparte se produzcan “decenas de miles de contactos” que den lugar a un gran volumen de operaciones en los próximos meses.
Hoteles llenos a 80 kilómetros
Pero no todo es vino y el presidente de la Administración provincial confirma que a día de hoy “prácticamente toda la oferta hotelera que hay a 80 kilómetros a la redonda de la capital está al 100 por cien” por la celebración de Fenavin. La Diputación también sabe que “muchos compradores internacionales no han hecho sus reservas hoteleras en la provincia, sino fuera”. En los próximos días, las bodegas de la provincia de Ciudad Real van a echar el resto para que los contactos comerciales provoquen operaciones en el futuro, pero está claro que la Feria Nacional del Vino “generará indudablemente más retornos económicos a la provincia” a través de la restauración, hoteles, transporte y demás recursos relacionados con el turismo.
