Durante su intervención en el debate de investidura en la Cámara Baja, Arrimadas ha afirmado que “hay muchos españoles muy preocupados” con el Ejecutivo que pretende formar Sánchez, por las políticas económicas “populistas y comunistas” de Unidas Podemos y por las “cesiones al nacionalismo”.
Pero también por los “ataques a las instituciones”, ha añadido. Según ha señalado, los socios de Sánchez arremeten contra el Rey, los jueces y los símbolos nacionales porque “saben que son garantía de unión, libertad, igualdad, solidaridad y convivencia” en España, y al atacarlos “debilitan la democracia”.
La diputada de la formación naranja ha concluido que “pactar con EH Bildu, el PNV y ERC es desigualdad, es nacionalismo y es sanchismo”, no es “progresismo, socialdemocracia o izquierda”.
NI ESTABILIDAD, NI UN GOBIERNO SENSATO
Además, ha advertido de que el líder socialista “quiere cavar trincheras” y que “necesita el extremismo” porque “es la gasolina” de su “proyecto populista y nacionalista”. Frente a esto, el papel de Ciudadanos es ofrecer “una alternativa de centro” y hablar del futuro, no del pasado, ha defendido, lamentando que Sánchez se negara a buscar una mayoría alternativa con el PP y Cs.
“No vamos a tener estabilidad, ni un gobierno sensato, ni unos socios que piensen en España”, ha pronosticado Arrimadas, que ha insistido en que a Sánchez “no le ha votado ni un solo español para hacer lo que está haciendo hoy”.
En este punto, ha recordado cómo el candidato del PSOE ha cambiado su discurso respecto a lo que decía sobre Podemos y sobre los partidos nacionalistas antes de las elecciones generales de noviembre.
SÁNCHEZ “HACE LA PELOTA” A LOS SEPARATISTAS
En aquel momento propuso tipificar el delito de celebrar un referéndum ilegal, pero ahora “le ha regalado a ERC una consulta en Cataluña” mientras desde este partido reconocen que “les importa un comino la gobernabilidad de España”, ha destacado, afeando también a Sánchez que permanezca “impasible” mientras sus socios sostienen que en España hay presos políticos.
En definitiva, Arrimadas considera que Sánchez “ha despreciado a los votantes constitucionalistas y ha hecho la pelota a los separatistas”.
Ante esta situación, ha vuelto a pedir que en la bancada socialista surja “un voto valiente” que evite este martes la investidura de Sánchez, y ha negado que eso se pudiera definir como un “tamayazo” o como “transfuguismo”.
Tras recordar otros momentos en que diputados del PSOE incumplieron la disciplina de voto, les ha instado a hacerlo una vez más, en esta ocasión “por la igualdad de los españoles y para garantizar la convivencia”.
