Cáncer es una palabra de ecos profundos y que inspira terror en su escucha en primera persona. Esta enfermedad es la segunda causa de muerte en España, la primera para el varón, y su incidencia aumenta, y por encima de las previsiones, así lo detalla el jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital General de Ciudad Real, Javier Espinosa: en 2015 se preveían 222.000 casos y se registraron 250.000. “Unas previsiones como si estuviéramos ya 2020”.
Ante este negativo panorama, el doctor Espinosa ofrece luz y, pese al incremento del número de casos, del mismo modo subraya que la tasa de mortalidad por esta enfermedad se reduce y ya el 60% de los pacientes superan con éxito la enfermedad. Por este motivo recalca que “cáncer no es sinónimo de muerte, sino de una esperanza y lucha ante una enfermedad que la mayoría de los pacientes puede superar”.
Los tratamientos contra el cáncer siguen evolucionando y, pese a que la quimioterapia ya ha tocado techo, existen nuevas alternativas que han cambiado el panorama ante distintos tumores. Los avances vienen sobre todo de la mano de nuevas moléculas, casi todas por vía oral, que son inhibidores de señales intracelulares que están logrando buenos resultados en cáncer de pulmón y mama. En concreto en la mama los anticuerpos monoclonares han cambiado el panorama y han reducido notablemente su mortalidad en los últimos años.
En este punto el doctor Espinosa destaca los positivos resultados de la inmunoterapia, que en el caso del cáncer de pulmón han demostrado un incremento significativo de la supervivencia respecto a la quimioterapia. Sin embargo, “no es café para todos”, y la inmunoterapia no es apta para todos los afectados. Los candidatos a beneficiarse de ella deben presentar más del 50% en la determinación molecular del PD-L1.
Igualmente indica que la inmunoterapia tarda en actuar en torno a dos meses y en los casos de necesidad urgente en ocasiones no es la mejor herramienta, porque en ese período la enfermedad puede avanzar. Concreta en este punto el doctor Espinosa que “la quimio no ha sido desbancada en el tratamiento del cáncer de pulmón, sino que se suma a la inmunoterapia”. En este sentido informó de que recientemente los oncólogos de la región han analizado los resultados de la unión de ambos tratamientos y los resultados son alentadores.
Prevención
El jefe del Servicio de Oncología Médica de Ciudad Real reconoce la importancia de los avances en el tratamiento, sin embargo subraya que una de las prioridades debe ser actuar en la prevención primaria. El cáncer es una enfermedad multifactorial y las causas pueden ser múltiples, algunas incontrolables, como la contaminación ambiental o las radiaciones ionizantes de móviles. Pero hay factores de riesgo sobre los que sí se puede actuar: la obesidad, el tabaco y el alcohol como principales factores de riesgo.
En este sentido, considera fundamental mantener hábitos de vida saludable y potenciar una cada vez más olvidada dieta mediterránea, rica en frutas, verduras, cereales y aceite de oliva. En este punto considera esencial el desarrollo de campañas de prevención, que en caso de éxito evidenciarían en los próximos años una reducción en las tasas de cáncer.
Del mismo modo la detección precoz es fundamental y campañas tradicionales como la de cáncer de mama, la reciente de cáncer de colon y la recién impulsada de cérvix se posicionan como iniciativas fundamentales para el éxito en la superación de un proceso cancerígeno.
AECC y oncólogos
Y es que para Espinosa las cifras son preocupantes: 250.000 casos en una población de cuarenta millones de habitantes y una prevalencia de personas que tienen o han tenido cáncer de más de dos millones de personas. En este punto ensalza la labor de asociaciones como la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) que prestan ayuda a los enfermos y supervivientes en apartados en los que la Sanidad Pública no llega bien.
Ante el número creciente de casos y de supervivientes que necesitan un control, Espinosa reconoció que hacen más faltas más oncólogos en todo el país. La Sociedad Española de Oncología Médica estima que se necesitan doscientos especialistas más para poder prestar una atención adecuada a los pacientes. “Nosotros en el Hospital de Ciudad Real necesitaríamos un oncólogo más para poder atender con más tranquilidad a los pacientes, y un segundo si queremos completar la funciones que debe desempeñar un especialista que, además de atender al paciente, son prevención, investigar y formar, tanto en la Facultad de Medicina como a la población en general”.
Insiste Espinosa en que atender al paciente no es sólo poner un tratamiento y pedir pruebas, es fundamentar hablarle con tranquilidad, contestar a todas sus preguntas y dudas en momentos duros de su vida. Cree el doctor que muchas veces los pacientes ven que no tienen tiempo y se cortan, en cierta medida, de preguntar. “A nosotros nos gustaría evitar eso, empatizar con el enfermo es muy importante”.
En este sentido reivindica una consulta de enfermería para Oncología. “Creo que es básica porque muchas veces el enfermo no se atreve a preguntar al médico ciertas cosas, pero con la enfermera se mantiene una relación más distendida y el paciente pregunta más cosas; además la enfermera es capaz de controlar otras patologías psicológicas o nutricionales que en una consulta normal por falta de tiempo no se pueden atender.
Por último el jefe del Servicio de Oncología Médica destaca que la inversión en tecnología en los últimos tiempos está repercutiendo positivamente en diagnósticos más precoces y en la mejora de los tratamientos radioterápicos. Satisfecho con estos avances, reclama uno que sería muy positivo: un aparato de secuenciación masiva del ADN, que permitiría diseñar tratamientos más certeros para cada caso.