El 42% de las carreteras españolas presenta obstáculos que no están debidamente protegidos en los márgenes de sus calzadas, según la auditoria de la red realizada por la Asociación Española de la Carretera (AEC), que considera que estos elementos pueden resultar «fatales» para los ocupantes de un vehículo en caso de sufrir una salida de vía.
Entre los elementos que suelen estar ubicados a uno y otro lado de las carreteras y con los que puede colisionar un vehículo que se salga de la vía figuran árboles, postes de alumbrado, vallas publicitarias u obras de fábrica (desmontes, cunetas, muros o pilares de puentes, entre otros).
La AEC indica que la normativa técnica relacionada con estos elementos señala que la primera actuación debe pasar por «desplazar, modificar o eliminar el obstáculo». En caso de que ello no sea posible, «es imprescindible protegerlos mediante los sistemas de contención adecuados».
En este sentido, la asociación recuerda que la pérdida de control del vehículo y su salida de la vía estuvo presente en el 20% de los accidentes mortales de tráfico registrados el pasado año, que a su vez computaron el 35% de los fallecidos en siniestros de circulación y el 25% de los heridos de gravedad.
Según la normativa (la Orden Circular 28/2009) se consideran elementos o situaciones de potencial riesgo, y que por ello, requieren la instalación de sistemas de contención, los báculos de iluminación, los elementos que sustentan carteles, los postes SOS, las pantallas anti-ruido y las carreteras o calzadas paralelas.
También requieren protección los accesos a puentes, túneles y pasos estrechos, los elementos estructurales de los pasos superiores, las cunetas, los desmontes y los terraplenes.