La fuerte caída experimentada en marzo en las ventas de coches se explica por la expansión del coronavirus y las medidas adoptadas por el Gobierno, entre las que destaca la limitación de movilidad de la población, lo que motivó el cierre de los concesionarios y la práctica paralización del mercado automovilístico.
Entre enero y marzo, las ventas de automóviles en España se situaron en 218.705 unidades, un 31% de reducción en la comparativa con las 316.890 unidades comercializadas durante el primer trimestre del ejercicio pasado.