El prior de la Abadía Benedictina de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, dará su permiso para exhumar los restos mortales de José Antonio Primo de Rivera, cuando se lo soliciten, según han confirmado fuentes conocedoras a Europa Press.
Aunque el prior aún no ha recibido la petición oficial de permiso, las mismas fuentes precisan que lo concederá al tratarse de una petición de la familia del fundador de la Falange.
La familia de Primo de Rivera solicitó el pasado mes de octubre al prior del Valle de los Caídos y a la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Salud de la Comunidad de Madrid, exhumar los restos de José Antonio Primo de Rivera, antes de que el Valle se convierta en cementerio civil con la nueva Ley de Memoria Democrática.
También solicitó las licencias correspondientes al Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial. Una vez obtenida la autorización solicitada, los restos serán depositados en el lugar que la familia ha decidido cumpliendo así la voluntad manifestada en su testamento por José Antonio Primo de Rivera, en cuya cláusula establece: “Deseo ser enterrado conforme al rito de la religión Católica, Apostólica, Romana, que profeso, en tierra bendita y bajo el amparo de la Santa Cruz”, según indicó en un comunicado el duque de Primo de Rivera, Fernando Primo de Rivera, representante de la familia.
Precisamente, este lunes, el Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial ha aprobado la licencia urbanística para proceder a la exhumación de Primo de Rivera del Valle de los Caídos a instancias de sus descendientes para trasladar los restos antes de que Cuelgamuros se convierta en cementerio civil con la nueva Ley de Memoria Democrática.
Así consta en el acta de la Junta de Gobierno Local celebrada el pasado 23 de febrero en la que se fijan las condiciones en la que queda sujeta dicha autorización para que se proceda a la extracción de los restos mortales del fundador de la Falange.
El pasado enero, la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos presentó una solicitud para la concesión de una licencia para la retirada de la losa sepulcral y reposición de solado en la Basílica como consecuencia, según manifiesta en su solicitud, de la exhumación de los restos mortales de Primo de Rivera.
Según la documentación, el informe técnico considera que “la actuación pretendida es una obra de recuperación, que está admitida dentro de las actuaciones que pueden realizarse en cada uno de los elementos incluidos en el catálogo, dirigida a restituir las condiciones originales del elemento catalogado en la zona en la que se propone la intervención, mediante la sustitución de la losa de granito actual por losas de mármol”.
La licencia queda sujeta a una serie de condiciones generales como por ejemplo que las obras deberán comenzar dentro del plazo de un año y deberán estar terminadas en tres años. Además, solo se podrá conceder una única prórroga por un nuevo plazo no superior al inicialmente acordado, previa solicitud expresa formulada antes de la conclusión de los plazos previstos para el comienzo y para la finalización de las obras, siempre que la licencia sea conforme a la ordenación urbanística vigente en el momento de su otorgamiento.
LA FAMILIA QUIERE QUE SEA EN LA “ESTRICTA INTIMIDAD FAMILIAR”
La familia de Primo de Rivera solicitó exhumar los restos antes de que el Valle se convierta en cementerio civil para que el proceso de exhumación permanezca “dentro de la estricta intimidad familiar, sin que pueda convertirse en una exhibición pública propensa a confrontaciones de ninguna clase entre españoles”.
Según ha expresado la familia, “José Antonio seguirá manteniendo el sitio preeminente que le corresponde en la memoria de muchos españoles y no podrá ser objeto de más humillaciones”, al ser este el cuarto traslado que se produce desde su fallecimiento. Su nuevo enterramiento sería “el quinto de su mal llamado eterno descanso”, según han añadido.