El actor español Javier Bardem ha criticado a aquellos dirigentes políticos y a parte de la sociedad que no creen en la existencia del cambio climático y ha asegurado que aquel que es negacionista de este fenómeno “se retrata a sí mismo como un auténtico estúpido”.
Así lo ha declarado durante la presentación del documental ‘Santuario’, que el intérprete ha grabado junto a Greenpeace y que este viernes ha presentado en la Cumbre del Clima (COP25) que se está celebrando en Madrid. Bardem, es el protagonista de una campaña de la organización ecologista para lograr proteger la Antártida.
Con ellos viajó diez días a conocer el polo sur y su ecosistema, interactuando con pingüinos, focas, ballenas y orcas. El actor también se atrevió a visitar el fondo del océano en un subamerino científico y participó de algunas de las investigaciones que los expertos llevan a cabo en el lugar con el objetivo de hacer de la zona un “santuario” libre de la mano del hombre,
Con esta iniciativa, recogida en el documental, Bardem ha aumentado la expansión del mensaje de la organización, según ha señalado Greenpeace. El propio actor reconoce que no es fan de las redes sociales pero al compartir fotografías y mensajes de esta experiencia en sus cuentas oficiales fue consciente de la repercusión que estas pueden llegar a tener. “Más de 20 millones de personas vieron o leyeron nuestras publicaciones durante el viaje”, ha explicado.
A su juicio, el mensaje del cambio climático ya se está produciendo y la sociedad actual no es la misma que “en los últimos tres años”. Preguntado por aquellos que todavía duda de que exista este fenómeno, Barden ha señalado los 30 años de investigación científica que esta materia tiene a sus espaldas, pero también algo que considera “básico”: “A mis 50 años, recuerdo cuando era pequeño, vivía en Madrid y había 4 estaciones. Recuerdo el fresquito del otoño y el calor de la primavera. Ahora sólo hace o mucho frío o mucho calor”, ha apuntado.
EL CINE NO TRATA EL CAMBIO CLIMÁTICO
También ha señalado que el aumento de las emisiones comenzó a registrarse tras la revolución industrial. “Eso somos nosotros lanzando mierda hacia arriba”, ha apuntado, para insistir en que los negacionistas no tienen argumentos a los que aferrarse.
Durante el documental, también lograron que tres millones de personas firmaran una petición para que los gobiernos de todo el mundo declararan esta zona como protegida, una situación que no pudo lograrse al ser rechazada por Rusia, Noruega y China. Algunos de estos países se niegan a aprobar la protección de la antártida, según ha señalado el actor, porque su industria pesquera acude a sus aguas a extraer krill, un pequeño crustáceo que supone la base de la vida en la Antártida y que se usa, en su mayoría, para fabricar Omega 3.
Durante el coloquio, Bardem también ha sido interpelado para que diera su opinión sobre el papel del cine en la lucha contra el cambio climático, un sector que, a su juicio, “está empezando a despertar”, aunque “le queda mucho por hacer”. El actor ha reconocido que no se rueda de forma eficiente, aunque se está intentando mejorar y también señala que “el cine mundial no está tratando” el clima más que para hacer películas “sobre catástrofes”.
