Tras su escalabro ante Inglaterra, la Roja necesita ganar ante Croacia para certificar su pase a los playoffs de la Nations League, ya que en caso de empatar a puntos con los británicos, estos quedarían por delante.
Con cuatro de las seis jornadas disputadas, España apura sus opciones para estar en la ronda final de la UEFA Nations League. La selección marcha por el momento como primera en el complicado Grupo 4 de la Liga A que le ha tocado, el cual comparte con Inglaterra y Croacia.
Tras un primer parón en el que la Roja se salió, venciendo por 1-2 a los británicos y por 6-0 a los balcánicos, todo se ha torcido en estas dos últimas jornadas. El empate a cero entre sus dos rivales dejaba a los de Luis Enrique con dos ‘match ball’ para certificar su clasificación, pues en caso de lograr una victoria más ya serían matemáticamente primeros. Pero su derrota ante Inglaterra lo ha complicado todo, viéndose ahora mismo España obligada a vencer en su último duelo ante los actuales subcampeones del mundo.
Con seis puntos le saca solo dos al conjunto dirigido por Gareth Southgate, que tratará de aprovechar cualquier mínimo resquicio para ser ellos los que logren pasar a los playoffs. Recordemos que esta competición se resuelve en unas eliminatorias de semifinales y final entre los cuatro ganadores de los grupos de esta Liga A, estando la Roja entre las favoritas en las apuestas de Betway como primera campeona de la Liga de las Naciones, hecho que cotiza a 4.00 (a día 18 de octubre del 2018). Aunque, para ello, primero debe certificar su pase a la ronda final ganando en casa de una Croacia que aún cuenta con unas opciones muy remotas de clasificarse.
Primera derrota con Luis Enrique
Por lo tanto, habrá que ver cómo afronta el nuevo seleccionador español esta dura derrota en casa ante Inglaterra, que gracias a sus tres goles en el Benito Villamarín le tienen ganado el golaveraje a la Roja. Esto quiere decir que si Luis Enrique no quiere tentar a la suerte, debe ganar en la quinta jornada a Croacia para estar en las semifinales. De lo contrario, en caso de empate o derrota, estarán a merced de lo que este equipo e Inglaterra hagan en el último duelo del grupo en Wembley.
Lo que está claro es que desde las dolorosas derrotas de la pasada Copa del Mundo, Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol, no quiere que se repitan errores y que el equipo siga evolucionando para encontrar, al fin, un resultado digno de su calidad.
Por esa razón hay varias cosas que se están cambiando desde la propia RFEF, que contó con la prematura salida tanto de Julen Lopetegui, primero, como la de Albert Celades después. La búsqueda de un nuevo título pasa por Luis Enrique, en quien se ha depositado toda la confianza, pero, tras tres victorias muy llamativas, el equipo se vio muy bajo en la primera parte ante Inglaterra, algo que no se puede repetir.
Por lo tanto, la Roja, que desde el pasado agosto pasó a ser patrocinada por CaixaBank en lugar de Movistar, que llevaba ocho años como sponsor de la camiseta española, tendrá que mostrar su fortaleza el próximo 15 de noviembre, cuando tenga que enfrentarse a la temida Croacia. En ese encuentro se espera volver a ver esas sensaciones arrolladoras con las que los de Luis Enrique machacaron a los balcánicos por 6-0 en un encuentro para la historia.
El empate podría ser valioso, la derrota lo complica todo
Aunque, en caso de empatar o perder, los números podría seguir saliendo. Si España logra un punto, se quedará con siete y eliminará a Croacia como posible campeón, aunque estos podrían aún adelantar a Inglaterra como segundos para evitar el descenso. En ese escenario, la Roja necesitaría un empate o una victoria de los balcánicos en Wembley o, de lo contrario, perderían su primer puesto.
En el caso de caer derrotados ante los subcampeones del mundo, los de Luis Enrique tendrían dos enemigos: Croacia e Inglaterra. Por esa razón, en este hipotético ejemplo, la selección necesitaría un empate entre ambos para ser primera, todo lo demás significaría haber perdido esa primera plaza, así como la posibilidad de pelear por ser el primer campeón de esta nueva competición de la UEFA, la Liga de las Naciones.
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