La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha señalado este miércoles que “margen para negociar tiene que haber siempre”, al ser preguntada si habrá o no cambios en la proposición de ley de amnistía que, tras el voto en contra de Junts, ha vuelto a la Comisión de Justicia del Congreso. No obstante, ha confiado en que los independentistas catalanes finalmente apoyen un texto legal “pactado hasta en cuatro ocasiones”.
“Yo diría que margen para negociar tiene que haber siempre. Quiero decir que, por supuesto, cuando transcurre tiempo y hay una voluntad clara de diálogo por ambas partes, pues siempre hay condiciones para poder seguir incorporando cuestiones que, como siempre dijimos, tenían que ver con mejoras técnicas”, ha indicado en declaraciones a TVE, recogidas por Europa Press.
Eso sí, Montero ha querido subrayar que el texto legal que se votó ayer en el Congreso ya ha sido “pactado” hasta en cuatro ocasiones, por lo que ha dicho que confía en que Junts acabe apoyándolo, ya que cuenta con el apoyo del resto de socios de investidura y porque “claramente es beneficioso” para que la situación en Cataluña continúe en el cauce institucional, ha incidido.
Según la vicepresidenta primera, el texto que entró en el Congreso de los Diputados tenía “todas las garantías para ser un texto constitucional” y el Gobierno sostiene que las cuestiones que Junts quería incorporar al mismo “no tenían todas esas premisas”.
“Volvemos a repetir que no cualquier texto de amnistía es constitucional. El que el Gobierno promovió así lo era y por tanto lo que queremos es que del Congreso salga igualmente un texto que tenga esa seguridad jurídica que es imprescindible para tramitar este proyecto de ley”, ha indicado.
Montero confía en que Junts “recapacite” y ha remarcado lo “incomprensible” que resulta que el partido del expresidente catalán Carles Puigdemont se alineara con PP y Vox en la votación, dos formaciones políticas que han dejado “muy claro”, ha dicho, que su única respuesta para Cataluña es “encarcelar a los líderes independentistas o ilegalizar directamente sus partidos políticos”.
En cuanto a los ataques y acusaciones de prevaricación que Junts dirigió de nuevo a los jueces en el Pleno del Congreso, Montero ha señalado que la posición del PSOE es de “respeto absoluto” al “rigor, la profesionalidad y la independencia del poder judicial”.