Los imprevistos económicos son una realidad actual. Nadie está exento de sufrir algún gasto imprevisto que lo deje prácticamente en números rojos respecto a sus finanzas. Para estos casos, la mayoría opta por tener un presupuesto para emergencias, mismo al que se le pueda echar mano cuando se presenta algún evento extraordinario.
Estos episodios llegan a tener muchas causas, desde la vuelta al cole de los niños, alguna reparación urgente o avería del coche e incluso un daño dentro de casa, la lista es bastante larga, por lo que estar preparado siempre resultará conveniente para enfrentarlos, aunque no es algo que sea factible en todos los casos.
Opciones financieras
Pese a que son muchas las familias que optan por este presupuesto de emergencias, el ritmo de vida actual lo hace complicado para la gran mayoría. Para nadie es un secreto que las diferentes responsabilidades y obligaciones van en aumento con el paso del tiempo, tanto en la comida, la salud como los servicios, por lo que ahorrar resulta difícil.
Entonces y ante este desamparo desde el punto de vista económico, siempre se va a necesitar un plan b para acudir cuando la situación lo amerite. Las opciones financieras van de la mano de las tarjetas de crédito, siempre disponibles, sin importar la hora, el día o el lugar, vendrán bien.
Pero no todo es color de rosa. Algunas veces las cantidades que deben cubrirse son tan altas que los límites de las tarjetas no alcanzan a cubrirlos o por el contrario, ya han sido utilizadas para saldar cualquier otra deuda y entonces los créditos se perfilan como la alternativa más indicada.
Adiós a los créditos bancarios eternos
Muchos al hablar de créditos tienden a pensar de inmediato en instituciones bancarias tradicionales, con sus cientos de requisitos, visitas eternas a las agencias y por supuesto largos tiempos de espera antes de obtener una respuesta que no siempre termina siendo positiva ni mucho menos por la cantidad que se tenía en mente desde un principio.
Ahora y con el desarrollo y avance de Internet, el mercado financiero también se ha visto afectado pero de forma positiva, al menos para los usuarios en estos momentos difíciles, los créditos rápidos son una realidad a la que cada vez pueden optar mayor cantidad de personas sin que resulte tortuoso, todo se hace a través de la web y sin tener que moverse de cada siquiera una sola vez.
En el pasado los créditos estaban dirigidos a clientes con gran experiencia crediticia en la entidad bancaria. Esta se acumulaba mediante el pago al día de las tarjetas de crédito y balances positivos al finalizar el mes, dejando fuera a un amplio sector de la población como los jóvenes o incluso aquellos que por alguna razón para el momento no contaban con un empleo fijo o eran dependientes desde el punto de vista laboral y por supuesto los que aparecían en listas de morosos como Asnef.
Mayores oportunidades con menos requisitos
Optar por un crédito online es tan fácil como revisar el correo electrónico. Es decir, cualquiera puede hacerlo desde el lugar donde se encuentre sin que sea necesario siquiera imprimir una planilla.
El proceso es muy sencillo. Solo se debe rellenar la solicitud y enviar el soporte que en este caso es una copia del DNI para asegurar que el cliente sea mayor de edad y esperar la respuesta en menos de 15 minutos al correo electrónico o mediante un mensaje de texto al móvil. Hay que destacar que la respuesta es casi siempre es positiva.
Para aquellos que por alguna razón cayeron en la lista de Asnef no hay nada que temer. Las oportunidades siguen siendo las mismas. Y es que los minicreditos con asnef resultan favorables en cualquier momento o circunstancia, siendo igual que para cualquier otro cliente, no hay distinción de ningún tipo.
Claro desde el principio
Los mini créditos con Asnef van desde los 300 y hasta 800 euros en la primera solicitud. Las condiciones para solicitar minicréditos con Asnef al igual que el proceso para pagarlo se establecen desde el principio sin largos contratos, cláusulas engañosas o tasas de interés variables. Únicamente debe asumir los honorarios, esta cantidad es un pequeño porcentaje de la que se le otorgará.
Al igual que el cliente decide la cantidad de dinero que va a solicitar, es él mismo quien establece el tiempo que requiere para devolverlo, pudiendo ir entre una y hasta seis semanas desde el momento en que recibe el dinero en su cuenta bancaria.
Entre las múltiples ventajas que este tipo de herramientas supone respecto a los créditos tradicionales, aparte de la comodidad y rapidez, es que están disponibles durante todo el año las 24 horas del día, garantizando de esta forma una mejor atención y respuesta para los momentos de dificultad.
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