La asociación Pedalibre ha pedido este miércoles al Ayuntamiento de Madrid que retire la anunciada ordenanza de movilidad que impone del casco obligatorio a menores de 18 años porque «perjudica la seguridad y promoción de la bicicleta».
Pedalibre iniciará cuantas acciones judiciales sean necesarias para restituir «el derecho conculcado al incluir la nueva ordenanza una restricción sobre un tema ya regulado en una ley de ámbito superior, el Reglamento General de Circulación».
«Esta medida echa por tierra las recomendaciones de usar el casco e impone una obligación que, de acuerdo con la experiencia que existe, genera un efecto disuasor del uso de la bicicleta y su seguridad», esgrimen.
Según explican, cada cierto tiempo salta a los medios, normalmente de manos de aseguradoras o asociaciones de automovilistas, el tema del casco. «Junto con el carnet ciclista o la necesidad de un seguro, son argumentos que, bajo la apariencia de incrementar la seguridad ciclista, esconden una oscura intención de usar menos la bicicleta, generar inseguridad jurídica para las víctimas de accidentes y no reducir ni los privilegios ni el abuso de automóviles o motos», apunta Pedalibre.
En esta ocasión, consideran que el Ayuntamiento de Madrid se posiciona así, en contra de lo que en 2013 manifestó, junto con otros municipios, sobre la propuesta inicial de la DGT, cuando María Seguí era la directora, de hacer obligatorio el casco.
Para la asociación ciclista, estos efectos negativos serían consecuencia del descenso del uso de la bicicleta y de su impacto sobre la salud pública (incremento de los índices de obesidad y de enfermedades coronarias), sobre la calidad del medio ambiente urbano y sobre la propia seguridad del tráfico en general.
A este respecto recuerdan que la bicicleta, por sus especiales características, es un vehículo potencialmente muy seguro tanto para el propio usuario como para los demás usuarios de la vía, «mucho más seguro que otros vehículos privados, como las motocicletas o el automóvil».
«En particular, un descenso en el uso de la bicicleta como consecuencia de la obligatoriedad del uso del casco ciclista, podría ir acompañado de un incremento paralelo del uso de motocicletas y ciclomotores, con las consecuencias negativas que cabe imaginar para la seguridad global de tráfico urbano», auguran.
OTROS «DESPROPÓSITOS» DEL AYUNTAMIENTO
Este anuncio del Ayuntamiento de Madrid se suma a los «numerosos despropósitos y ataques» que aseguran que sufren desde hace demasiado tiempo y que ha motivado masivas manifestaciones en bicicleta, la última, el pasado 24 de abril.
Por ello, exigen al Ayuntamiento de Madrid la retirada inmediata de esta medida y otras como la restricción aparcamiento, prohibición túneles, etcétera, en la próxima ordenanza de movilidad y le instan a «informarse y actuar de acuerdo a la evidencia científica y la promoción de la movilidad sostenible».
Asimismo, se reservan cuantas acciones judiciales sean necesarias para restituir el presunto derecho conculcado y la presunta vulneración de una ley de ámbito superior.