El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha afirmado este martes en el Parlament: “Asumo el mandato del pueblo de que Cataluña se convierta en Estado independiente en forma de república”, pero ha planteado al Parlament suspender unas semanas los efectos de una independencia para entrar en una etapa de diálogo.
Lo ha dicho durante el pleno del Parlament que aborda las consecuencias del referéndum del 1-O, y que ha empezado más de una hora después: se ha retrasado porque el propio Puigdemont lo había pedido, y también porque PP y Cs habían solicitado suspender el pleno.
Puigdemont ha empezado su discurso a las 19.13 afirmando que el momento que vive Cataluña es histórico porque no un asunto doméstico o interno, sino que “Cataluña es un asunto europeo”.
Esfuerzo a España
Por otro lado, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha pedido este martes un esfuerzo al resto de españoles para conocer y reconocer lo que considera que está reclamando una mayoría de catalanes desde hace años: “No somos unos delincuentes ni unos locos ni unos golpistas”.
“Somos gente normal que pide poder votar y que ha estado dispuesta a todo para establecer el diálogo necesario para realizarlos de forma acordada”, ha añadido al leer un fragmento en castellano de su discurso en el Parlament.
Según Puigdemont, no tienen nada contra toda España ni contra sus ciudadanos, sino lo contrario: alega que el deseo mayoritario de los catalanes es “reentenderse mejor” con todos ellos porque, a su juicio, la relación no funciona desde hace tiempo y no se ha hecho nada para revertir una situación que considera insostenible.