Al tiempo, el presidente del Gobierno no ha querido confirmar que la primera reunión con los de Carles Puigdemont se vaya a producir en Ginebra este sábado.
En una entrevista en TVE, recogida por Europa Press, Sánchez ha señalado que tanto quién ejercerá de verificador con Junts como con ERC se conocerá a su debido tiempo, al igual que el lugar fuera de España donde se producirá el primer encuentro con los primeros. «No estamos todavía en condiciones de decir dónde va a ser», ha señalado.
El presidente ha defendido esta figura, incluida en los acuerdos alcanzados con ambos partidos independentistas, sobre la base de que «si dos no se entienden, el que nos acompañe un tercero en esa labor de verificación es una buena noticia porque nos puede ayudar efectivamente a llegar a acuerdos».
Se trata, ha admitido Sánchez, de «un mecanismo excepcional» como también lo es la situación de estos dos partidos «en el sistema político español». «Ojalá en un futuro no necesitemos este sistema de verificación porque eso significará que hemos construido una confianza» que «honestamente», ha reconocido, no tener actualmente de forma «completa ni total».
En este sentido, ha remitido a los documentos firmados y que el PSOE hizo públicos en su momento, subrayando que el objetivo de las mesas tanto con ERC como con Junts es «hablar de lo que se ha calificado por parte del independentismo como conflicto político, porque evidentemente existe un conflicto político que tenemos que abordar».
POSICIONES DISPARES DE PARTIDA
Sánchez ha resaltado que en ellos se puede constatar que las posiciones de partida del PSOE y de los partidos independentistas es muy distinto. «Ellos están defendiendo la independencia de Cataluña y nosotros estamos defendiendo el Estado de las autonomías, el autogobierno de Cataluña, que ha traído mucha prosperidad, cohesión a la sociedad catalana y en conjunto a la sociedad española», ha subrayado.
Así las cosas, frente a quienes aseguran que en las mesas de diálogo con los independentistas se va a decidir el futuro de España, Sánchez ha sostenido que este se decide «en las Cortes Generales».
Con todo, ha insistido en que es «una buena noticia» que partidos que parten de «posiciones muy dispares y desde una extraordinaria desconfianza» se hayan convocado al inicio de esta legislatura «a hablar, a dialogar y, eventualmente, a acordar». «Ojalá logremos ese objetivo», ha confiado.
Por último, el presidente ha lamentado que desde la opinión pública se critique a los políticos por no llegar a acuerdos y «cuando nos sentamos en torno a una mesa para intentar llegar a un acuerdo en uno de los principales problemas constitucionales y territoriales que ha tenido este país durante estos últimos 45 años» no se brinde al menos el «beneficio de la duda».
