El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha dirigido a los políticos republicanos, y en especial a su predecesor Donald Trump, durante su discurso anual del Estado de Nación, que ha coincidido con la víspera del Día Internacional de la Mujer, para criticar que han “alardeado” de anular el derecho al aborto en el país y sostener que desconocen el poder de las mujeres.
“Mi predecesor llegó al cargo decidido a anular el caso Roe contra Wade. Él es la razón por la que fue anulado. De hecho, se jacta de ello (…) Está claro que quienes alardean de la anulación no tienen ni idea del poder de las mujeres en Estados Unidos”, ha declarado en referencia al histórico fallo del Tribunal Supremo estadounidense que anulaba el carácter de derecho constitucional al aborto, consagrado desde 1973, dando vía libre a los estados para promover sus propias legislaciones.
En este sentido, Biden ha criticado las leyes estatales “que prohíben el derecho a elegir, que criminalizan a los médicos y que obligan a la supervivientes de violación e incesto a abandonar sus estados para recibir la atención que necesitan”. “Muchos de ustedes en esta Cámara y mi predecesor están prometiendo aprobar una prohibición nacional de la libertad reproductiva”, ha lamentado.
“Dios mío, ¿qué libertades quitaréis a continuación?”, ha cuestionado, antes de remarcar que “Estados Unidos no puede retroceder”: “Si los estadounidenses eligen un Congreso que apoye el derecho a elegir, les prometo que restableceré Roe contra Wade como ley del país de nuevo”, ha prometido, tras reconocer la defensa reproductiva que hace su ‘número dos’, Kamala Harris.
Durante su discurso, el mandatario ha relatado la historia de una mujer de Dallas (Texas), Kate Cox, que tuvo un embarazo en el que el feto tenía una enfermedad mortal, y que se vio obligada a abandonar su estado para recibir el tratamiento recomendado por sus médicos para salvar su vida y su futura capacidad de tener hijos en el futuro. “Lo que pasó a su familia nunca debería haber sucedido. Pero les está sucediendo a muchas otras”, ha afirmado.
También ha mencionado la situación en el país de la fecundación ‘in vitro’, después de que un reciente fallo sin precedentes del Tribunal Supremo de Alabama considerara que los embriones congelados son niños, por lo que se han cancelado este tipo de tratamientos en todo el estado. En este sentido, ha pedido a los congresistas que garanticen el derecho a la fecundación ‘in vitro’ en todo el país.
Desde que el Supremo decidiera eliminar el derecho constitucional al aborto en 2022, más de una docena de estados liderados por republicanos ha vetado o limitado este procedimiento, poniendo en peligro a millones de mujeres. El mapa de las restricciones contra el aborto en Estados Unidos varía dependiendo de si se aplica un veto total, con alguna o ninguna excepción al incesto y la violación, y del total de semanas a partir de las cuales se puede interrumpir el embarazo.
A estas restricciones y vetos se suman otras, como los numerosos desafíos legales que han puesto en jaque la prescripción y distribución de mifespristona, uno de los dos medicamentos utilizados para abortar médicamente en el país, o el acceso a atención médica tanto sexual como reproductiva.