La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha alertado de los «enemigos clásicos de España, los que siempre han vivido de ella, y el más inesperado de todos los enemigos: el propio Gobierno de la Nación».
Desde la Real Casa de Correos, en una rueda de prensa para hacer balance de la acción del Gobierno regional durante 2024, la dirigente madrileña ha comenzando destacando que el 93% de las medidas del programa electoral con el que se presentó a las últimas elecciones «están ya cumplidas o en marcha».
«Aunque quieren acostumbrarnos a que mentir o cambiar de opinión suplantan programas de gobierno, en la Comunidad de Madrid defendemos la obligatoriedad de cumplir los compromisos con los que pedimos el voto a los ciudadanos», ha subrayado.
La dirigente madrileña ha defendido que tiene «un Gobierno honesto, que no hace pactos antinatura, que no dilapida el Código Penal, que no amnistía delitos, que no oculta el proyecto, como está ocurriendo con el Gobierno de Sánchez», que pretende instalar «de una manera cada vez menos oculta» al país en una «república plurinacional».
Ayuso ha sostenido que la Comunidad de Madrid «vive su mejor momento» y ha puesto en valor que «sus logros son fruto del trabajo bien hecho por parte de los ciudadanos, de las empresas y de la Administración».
«Madrid es un compromiso con el Estado de derecho, la libertad y la prosperidad al servicio de España. Es un proyecto que garantiza unos servicios públicos de gran calidad, seguridad jurídica, convivencia, reconocimiento del esfuerzo y las puertas abiertas a todo el que quiere aportar», ha indicado a continuación.
La jefa del Ejecutivo madrileño ha remarcado que son conscientes «de que la mayoría absoluta conlleva una gran responsabilidad: la de gobernar para todos, para los que nos votaron y para los que no, y la de ser consecuentes» haciendo lo que piensan «con una idea clara de qué es Madrid y cuál es su futuro, sin medias verdades ni medias tintas, sin mentir ni ocultar ni confundir».
DEFENDER «LA VERDAD» EN UNA ESPAÑA «AMENAZADA»
A su parecer, «defender la verdad y la realidad es hoy más importante que nunca», ya que solo así podrán «seguir aportando a España cuando más amenazada se encuentra por sus enemigos clásicos, los que siempre han vivido de ella y el más inesperado de todos los enemigos: el propio Gobierno de la Nación». «Este ha decidido vivir al día manteniéndose en el poder a costa de lo que sea necesario aunque por delante se destruyan pilares fundamentales del Estado, la separación de poderes, el Estado de Derecho», ha trasladado.
La presidenta ha sostenido que los hechos y las cifras avalan a su Gobierno, «echando por tierra los discursos liberticidas, ideológicos, empobrecedores, que van desde los nacionalistas a los de la ultraizquierda». «Necesitamos estar más preparados que nunca para este 2025, que comenzará probablemente lleno de mentiras y de ataques a todo aquello que da sentido a nuestra nación y a nuestra historia», ha remarcado.
«VENDER LA POLÍTICA ESPAÑOLA»
Considera que «el objetivo de Sánchez y de su débil proyecto es atrincherarse al precio que sea, aunque no pueda sacar adelante votaciones fundamentales para los intereses de España y de los españoles, ni tener Presupuestos, aunque tenga que hacer sus pactos antinatura con lo que llamaría derechona vasca, o la derechona catalana o con la ultraderechona europea».
Para conseguir su proyecto, según Ayuso, les «hace falta estrangular a Madrid y descapitalizar España en una huida hacia adelante donde ya no se ocultan las obsesiones contra la Comunidad de Madrid, que es algo que acaban pagando todos los madrileños». Apunta a que «el Gobierno desprecia las competencias autonómicas y las políticas liberales que los madrileños han elegido claramente en las urnas».
«Sánchez necesita vender la política española como si se tratara de un campo de batalla alimentando un enemigo con el que confrontar para agitar ese muro que ha inventado y justificar meter la mano en los bolsillos de los madrileños, a los que además llama ricos, de manera insultante. Y esa obsesión personal con Madrid va a costar la imputación y probablemente la condena de algunos de sus más cercanos colaboradores, empezando por el propio Fiscal General del Estado, lo que no ocurre en ninguna democracia», ha trasladado.
