Decenanas de miles de personas -300.000 según la Delegación del Gobierno y un millón, según la organización- han marchado este sábado 6 de julio en el Orgullo de Madrid en medio de un ambiente festivo y con el lema ‘Educación, derechos y paz: Orgullo que transforma. Los convocantes reclaman una educación en diversidad como “herramienta fundamental” para combatir la LGTBIfobia y, además, han pedido el fin de la guerra en Palestina. También han acudido representantes del Gobierno, así como de los partidos que los sustentan y del PP y Podemos.
La pancarta principal ha partido de la glorieta de Carlos V y ha recorrido el paseo del Prado hasta la Plaza de Colón a ritmo de ‘Las babys’, de Aitana, ‘La potra salvaje’, de Isabel Aaiún, y ‘Yo quiero bailar’, de Sonia y Selena. Además, a la llegada de la marcha a Cibeles se han escuchado gritos de “no somos condones, ni copas, ni tacones”, en alusión a la campaña del Orgullo del Ayuntamiento de Madrid.
Entre los carteles que portaban algunos de los asistentes estaban mensajes como “Ayuso, el Orgullo no se vende, se defiende”, “educación en las aulas, amor en la calle”, “el amor no es un crimen” o “soy la oveja arcoíris de mi familia”.
La Federación Estatal LGTBI+ (FELGTBI+) y el colectivo LGTBI de Madrid (COGAM), organizadores de la marcha, han celebrado el recurso de inconstitucionalidad del Gobierno contra la Ley Trans y LGTBI de la Comunidad de Madrid, así como el acuerdo del Ejecutivo con sindicatos y patronal para los derechos laborales del colectivo.
“En un contexto marcado por la violencia internacional, los discursos de odio y la involución en derechos humanos, alzamos la voz por una educación verdaderamente inclusiva, para todas, para todos y para todes”, han apuntado las entidades organizadoras en el manifiesto que han leído en la Plaza de Colón.
A juicio de ambas, la visibilidad, “es más necesaria que nunca”. Asimismo, han destacado que la educación “es donde se siembra la igualdad o el odio” y donde, “mientras aumentan las personas jóvenes que se identifican como LGTBI+, crece también la violencia LGTBIfóbica”.
En este sentido, han exigido a las autoridades educativas que en los centros formativos se trabaje “activamente” para “eliminar y cuestionar los discursos de odio”. También han solicitado la creación a nivel estatal de una comisión nacional educativa en materia específica LGTBI+; la eliminación del llamado pin parental, “por ser un intento de censurar y perseguir la diversidad sexual en los centros educativos”, así como la inclusión de las familias LGTBI+ en las agendas escolares.
También han demandado campañas y “políticas educativas antidiscriminación” hacia el colectivo LGTBI+ en centros formativos; una formación continua en diversidad afectivo y/o sexual para las personas trabajadoras; la implementación “activa y real” de contenidos relacionados con la diversidad afectivo-sexual en los currículos educativos; y la creación e implementación de unidades y referentes de atención a la diversidad afectivo/sexual en los distintos centros educativos, incluidas las universidades.
“Ante los ataques de los discursos de odio, ante las cuentas falsas en redes sociales que vierten odio, ante la desinformación contra las personas trans en los medios de comunicación, ante la reacción que viene a por nosotras, que nos quieren llevar 20 o 30 años atrás, devolvernos al armario, al miedo y al silencio, lo que necesitamos son derechos”, han recalcado. Además, han exigido que se nombre “ya” la Autoridad Independiente para la Igualdad de Trato y la No discriminación y que se pongan en funcionamiento los Planes de diversidad LGTBI+ en las empresas.
LLAMAMIENTO “URGENTE” A LA PAZ
Asimismo, han pedido el fin de la guerra en Palestina y Ucrania. “En un mundo cada vez más polarizado, la violencia, el conflicto, el desencuentro, sigue siendo una realidad dolorosa y por eso hacemos un llamado urgente a la paz y a la protección de los derechos humanos”, han subrayado.
Según la organización, en la marcha han estado representadas casi un centenar de entidades sociales que luchan por los derechos del colectivo y han participado un total de 51 carrozas.
El ambiente festivo ha estado presente a lo largo de todo el recorrido de la manifestación, donde lentejuelas, brillos y sobre todo los colores han sido los protagonistas. Entre los asistentes, Paula y Sofía, una pareja de 25 y 24 años respectivamente, han viajado desde Málaga para acudir al Orgullo de Madrid, que consideran una celebración “importante” para “luchar por ser libres en cualquier lugar”.
En la misma línea se ha mostrado David, sevillano de 35 años, que ha acudido a la marcha madrileña para cumplir el deseo de su pareja. “Creo que somos un pilar importante en la sociedad española, pero deberían de hablar menos del colectivo y trabajar más por él”, ha apuntado.
Mientras, Consuelo, de 74 años, ha acudido a la marcha con su nieto Tony y la pareja de él, Manuel, y ha destacado estar “encantada” y la importancia de apoyar al colectivo LGTBI.
AMPLIA PARTICIPACIÓN POLÍTICA
En cuanto a la participación política, a la marcha ha acudido la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz; la ministra de Igualdad, Ana Redondo; el ministro de Cultura, Ernest Urtasun; y el del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Todos ellos han marchado detrás de la pancarta principal, junto con las entidades organizadoras. La ministra de Sanidad, Mónica García, ha estado presente en la carroza que por primera vez este departamento ha llevado a la manifestación.
También ha asistido el secretario de Políticas LGTBI del PSOE, Víctor Gutiérrez, la eurodiputada de Sumar Estrella Galán; y la vicepresidenta tercera de la Mesa del Congreso, Esther Gil de Reboleño.
En cuanto a Podemos, ha asistido a la marcha la extitular de Igualdad, Irene Montero, la exministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, así como su compañera de partido, Isa Serra.
Por su parte, los ‘populares’ han enviado una representación de la formación encabezada por la vicesecretaria de Igualdad, Conciliación y Políticas sociales del Partido Popular, Ana Alós, y el secretario de Cultura y portavoz de Igualdad del Partido Popular, Jaime de los Santos.