Éramos pequeños… Allí, en el comedor de casa, la mesa camilla, muchos papeles y una máquina de escribir, delante, nuestro padre, en lo suyo, su pasión, como tantos, escribiendo. Y, claro, periódicos por todos lados; uno de ellos se llamaba –y se llama– LANZA. Bien. Hay que celebrarlo, hay que volver a escribir, setenta y cinco años es algo muy grande para un diario, el diario de la Mancha, nada menos. Guardamos muchos, completos, y páginas con crónicas suyas y nuestras. Tenemos en las manos dos y añejas… Una de agosto de 1959 y otra de octubre del 55, y hay más de finales de los cuarenta. En la primera, una página de la Fiesta Nacional en donde en un artículo firmado por PAM se habla de un posible mano a mano Luis Miguel Dominguín-Antonio Ordóñez en Ciudad Real, del abono y encargo de localidades para las corridas de ferias de la capital y de la feria de Malagón, o de los próximos carteles en distintas plazas. Y, también, una crónica de Miguel García de Mora evocando una tarde de toros en Daimiel junto al gran empresario don Manuel Rodríguez Maestre, dos artistas, Lepe y Heredia, y una charla con el mencionado Luis Miguel que había actuado en el coso daimieleño. En la otra, se anunciaba la presentación de la bella actriz Amparito Rivelles en el Teatro de Ciudad Real, así como la construcción del pantano de Vallehermoso, la vendimia en Tomelloso, o las obras de adaptación de la biblioteca municipal de La Solana; y una pequeña crónica, muy sentimental, titulada La casa vacía, de nuestro padre.
Creemos recordar que, al principio, LANZA estaba en el quiosco que hubo en la Plaza Mayor de La Solana y seguro que en un lugar destacado… Lo llevaban Isabel y Santiago, dos hermanos cuya vida, amén de otros menesteres, fue llevar la prensa a las casas en su bolsa grande y esmerada durante muchos años. Después, un señor llamado Eugenio, muy amable, tomó el relevo y también recorrió el pueblo de punta a cabo. Al fin, venía un muchacho, muy jovencito, ya en los noventa… Fueron, en verdad, citas diarias, una espera siempre expectante en los domicilios. ¿Ha venido ya el repartidor de LANZA?, preguntaban los vecinos. Y ya más reciente, era el cartero, con tantas historias a cuestas, quien lo traía en su sempiterna cartera. Todos, incluidas las librerías ahora, han sido mensajeros de tantas noticias de La Mancha y de nuestro pueblo.
Primera colaboración
En 1970 hicimos nuestra primera colaboración, una crónica (o lo que saliera) sobre toros en la feria de La Solana, con entrevista al novillero Pablo Alonso Arruza, a la que siguieron muchas de tipo costumbrista, de cine o de fútbol. Gracias a éste conocimos a muchos compañeros de Ciudad Real como Pepe Deportista, Gonza-Ayllón, Joaquín Muñoz y otros de la radio. Todos los años, en algún colegio, se celebraba un encuentro entre corresponsales y colaboradores y trabajadores del periódico. Eran muy emocionantes, con muchos goles y luego venía la crónica con fotos y todo. Todo, en fin, son recuerdos muy entrañables. Haciendo la “mili” en el cuartel de artillería de Ciudad Real, donde coincidimos con muchachos de allí como Ramón, de LANZA, y Adolfo cantante del grupo “Cisnes”, quien nos concedió una entrevista para las páginas de Aquí… los discos del popular periodista Juan Bautista, también de La Solana, nos permitió, decíamos, seguir escribiendo cosas como una charla con una buena señora que vendía pipas o cigarrillos en su puestecito frente al cuartel; la llamaban “La abuela de los soldados”. Del gran fotógrafo Herrera Piña, tantísimos años en LANZA, guardamos una fotografía que hizo en San Pedro con motivo de un acto religioso. Nos reconoció el hombre entre varios jóvenes y vestidos de militar. Todo un detalle.
A mediados de los setenta, razones del trabajo nos llevaron hasta Alcalá de Henares. Nuestro periódico seguía con nosotros, por suerte. Fue, también, una etapa bonita y de conocer a gente interesante. A Bárbara Rey (la pusieron en una página completa, con una gran foto), a Armando Calvo, que fue el galán de Sara Montiel en “El último cuplé”, a José Sacristán, a Rocío Dúrcal (cuánto nos habló de La Mancha y sus pueblos) o al malogrado “Paquirri”, ay. Enseñábamos nuestro LANZA a amigos y conocidos muy orgullosos… y comentábamos con muchos manchegos la gran página que escribía don José Ballesteros, sacerdote y capellán del Hospital Provincial, titulada “Carta a los emigrantes”.
Muchas gracias, diario LANZA y enhorabuena. Y que sigas tan cerca.