Los disturbios policiales en un bar de Nueva York contra el colectivo homosexual en 1969 un 28 de junio, dieron lugar a marchas pacíficas y festivas en todo el mundo para reivindicar sus derechos. Cada año desde entonces y este mismo día se conmemora el que ha venido a denominarse Día del Orgullo, que supone para toda la comunidad LGTBI un acto de reivindicación por la igualdad de derechos, defendiendo que ninguna persona debe avergonzarse de su sexo biológico, de su orientación afectiva, su identidad sexual o su rol de género. En suma, un concepto que habla sobre la dignidad y el respeto que todo ser humano merece.
El Partido Socialista ha dejado patente su histórico compromiso con dicho colectivo – 17 años de matrimonio igualitario, 15 años de la ley de identidad de género, un año de la recuperación en la sanidad pública de la reproducción asistida a mujeres lesbianas, sin pareja y personas trans…. Para los socialistas, las personas, independientemente de su edad, orientación sexual o identidad de género, deben tener garantizados sus derechos a tener una vida plena y digna.
Actualmente España es el octavo país del mundo en la lucha por estos derechos, pero con la aprobación de la Ley de Igualdad de Trato y no Discriminación (Ley Zerolo) que se encuentra en fase de tramitación parlamentaria y de la próxima ley LGTBI y Trans, nos convertiremos en referentes mundiales, regulando temas tan importantes como la prohibición de las terapias de conversión y el derecho a la reparación de las víctimas de discriminación ante acciones que no son constitutivas de delito pero que se podrán sancionar por la vía administrativa.
Sin embargo, nos queda mucho por avanzar. En lo que llevamos de año se han producido más de 700 denuncias por incidentes LGTBIfóbicos en nuestro país, y en el año anterior hubo un incremento del total de los delitos de odio de más del 40% respecto al 2020, de lo que se deduce que el colectivo LGTBI se convierte en una de las minorías más vulnerables ante los ataques de las personas que lamentablemente aún se resisten al cambio social. Son pocos, pero cada día son más radicales, encontrando además amparo en los discursos de una ultraderecha cada vez más altiva.
En Castilla-La Mancha nos sentimos orgullosos de la labor llevada a cabo por el gobierno socialista de Emiliano Gª Page y la reciente aprobación, por unanimidad, de los tres grupos políticos representados en las Cortes de la región, de la Ley de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, aprobada el pasado 1 de junio, así como la puesta en marcha del proyecto de Educación Afectivo Sexual para la prevención de la LGTBI-FOBIA, que se está llevando a cabo durante todo el año 2022 por la Fundación Ceres, con la financiación de la Consejería de Bienestar Social, y que aboga por la sensibilización afectivo-sexual hacia la comunidad LGTBI y contra la LGTBI-FOBIA entre nuestros jóvenes.
Del mismo modo, la Diputación de Ciudad Real, el pasado 11 de junio, se sumó a la celebración del Orgullo LGTBI en la provincia encabezando el ya tradicional “Orgullo Provincial o Rural” en Cabezarados.
Por su parte, la Concejalía de Igualdad de Género en Ciudad Real participaba hace poco más de una semana en la gala de premios “Alas para la Diversidad” organizada por la asociación Espacio Diverso para la Igualdad LGTBIQ+, en la cual se reconocía a personas que llevan luchando por otorgar visibilidad al colectivo mucho tiempo. Además, acogía los talleres de “Formación en Prevención de la LGTBIQ+FOBIA en el entorno laboral para trabajadores y trabajadoras de la Administración Pública con perspectiva de género” e inauguraba las Jornadas de Participación Comunitaria y Sensibilización LGTBI+ en nuestra ciudad.
Por todo ello, desde la Agrupación Socialista de Ciudad Real nos sumamos un año más a las reivindicaciones del colectivo en este día y animamos a los vecinos y vecinas de nuestro municipio a hacer lo mismo, porque una sociedad que no discrimina es una sociedad más digna para la convivencia de todos y todas.
