No sé qué tipo de homenajes recibiría en otros lugares uno de los políticos y militares más importantes del siglo XIX en España y uno de los grandes protagonistas de nuestra historia, si este año se celebrara el aniversario de su nacimiento.
No sé el reconocimiento que se le tributaría más allá de nuestras fronteras, pero entiendo que la efeméride no pasaría desapercibida sobre todo si se trata del general y político liberal granatuleño Baldomero Espartero, uno de los personajes más relevantes de ese siglo. Su proyección fue tal que llegó a atesorar un gran número de insignias y condecoraciones junto a títulos nobiliarios con los que se le reconocieron los servicios prestados a su país tras una brillante trayectoria que le llegó a la cúspide del poder.
Sin embargo y como es conocido, Baldomero Espartero nació en Granátula de Calatrava en el año 1793 y fue el noveno hijo de una familia humilde. Aun así, sus orígenes no le impidieron ascender socialmente hasta el punto de llegar a ser conde, duque y grande de España, presidir hasta en dos períodos distintos el Gobierno y, tras la revolución que destronó a Isabel II en 1868, rechazar la oferta de ser el rey antes de que lo fuera Amadeo de Saboya. Recuerden la frase de “pudo ser rey y no quiso” que cuenta el dicho popular.
No obstante y pese a esa proyección militar y política, la relevancia del personaje ha saltado discretamente a la actualidad informativa provincial de la mano de los actos celebrados en la localidad en la que nació con motivo del 225 aniversario de esta efeméride. Unos actos que culminaban el pasado sábado con la inauguración del “Centro Cultural Espartero” ubicado en lo que fue su antigua casa familiar, una vez que el Ayuntamiento se hizo con la propiedad del inmueble, la primavera del pasado año, y comienza la reforma.
De manera discreta
Por otro lado, los actos celebrados este año en el IES “Maestro Juan de Ávila” de Ciudad Real con motivo del 175 aniversario de su apertura han contribuido a recordar, también de manera muy discreta, la figura del Espartero político, sobre todo porque en su etapa de Regente de España impulsó un sistema de enseñanzas medias que vertebró el país y sacó a muchas provincias, como la de Ciudad Real, de los niveles educativos más bajos.
Ciudad Real debe por tanto a este político, que se enfrentó al conservadurismo de la reina María Cristina, la apertura del entonces “Instituto de Segunda Enseñanza” en noviembre de 1843, uno “hito trascendental” para Ciudad Real debido a que la provincia sólo contaba por entonces con centros de educación primaria tras ser clausurada -19 años antes, en 1824- la Universidad de los Dominicos de Almagro.
La importancia de este centro la puso de manifiesto el ex presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, en la conferencia que pronunció el pasado mes, por el aniversario del Juan de Ávila. Éste fue, por lo tanto, el primer centro de enseñanza media que existió durante muchos años en Ciudad Real y que contó con servicios únicos como biblioteca, gabinete pedagógico y un jardín botánico, gracias al impulso que recibieron este tipo de enseñanzas.
Una figura vinculada a Logroño
Sin embargo, la figura de Baldomero Espartero está especialmente vinculada a Logroño, la ciudad en la que vivió tras contraer matrimonio con la joven riojana, Jacinta Martínez de Sicilia, una vez superadas las reticencias familiares iniciales. A la capital de La Rioja regresaba siempre que la política se lo permitía y cuando decidió pasar largas temporadas retirado de toda actividad, circunstancias que propiciaron la gran y estrecha relación que mantiene hoy con esta ciudad con uno de los personajes de la historia de España más reconocidos, y queridos en Logroño como muestra la gran estatua ecuestre erigida en su honor en el espolón y el palacio que lleva su nombre, hoy sede del Museo de La Rioja.
Su figura, además, forma parte del recorrido turístico por la ciudad, incluida la visita a la concatedral donde está enterrado, mientras en su tierra natal a duras penas ha sido levantado un centro cultural que irá tomando forma con el paso de los años para potenciar los valores patrimoniales y artísticos de la comarca.
Decenas de vecinos acudieron el pasado sábado a la inauguración de este nuevo espacio mientras era la banda de música quien concedía al acto la categoría de acontecimiento. Como hacemos en nuestros pueblos, en las grandes ocasiones.
Sirvan estas líneas de reconocimiento a la figura de este militar y político progresista. Desde su tierra.