No suelo prodigarme en los medios de comunicación solamente en la atención a los medios como parte de mi trabajo. Tampoco soy amante de la polémica, ni considero que estos medios de comunicación sean el lugar más idóneo para la discrepancia intelectual. Pero ante la controversia creada por el desarrollo de una feria de esoterismo en el Museo CGR no me queda más remedio que puntualizar algunas de las opiniones que se han vertido al respecto.
El mal llamado Museo Cristina García Rodero es una mera colección de algunas fotografías de nuestra ilustre paisana, sin un nexo común, siendo en realidad una pequeña colección de su ingente obra. Con esta colección ni se puede divulgar coherentemente su obra, ni estudiar su trayectoria, tampoco podemos propiciar, la investigación ni siquiera exponer las colecciones que se albergan en los almacenes de la dependencia. Llanamente no somos un museo.
¿Porque estamos en este punto?, sencillamente porque se ha vendido humo sin firmar ningún documento, sin establecer los derechos y obligaciones de cada una de las partes, sin plantear un plan de viabilidad, etc.
Sin embargo al vender a bombo y platillo esta iniciativa, se ha cerrado la puerta al resto de las artes plásticas. La única directriz marcada desde la flamante inauguración del museo fue que el edificio a partir de esa fecha solamente albergaría exposiciones fotográficas, algo que se ha cumplido a un 90%. En cinco años solamente hemos realizado dos actos ajenos a la naturaleza del supuesto museo. La primera fue una magnifica retrospectiva de la obra de otro ilustre de nuestra localidad D. Manuel Prior y esta exposición se realizó como homenaje a este artista que posee una dilatada trayectoria pictórica y que por su edad quisimos homenajearlo en vida y no como suele suceder recordarlo tras su fallecimiento. La segunda actividad, realizada recientemente, ha sido una feria de esoterismo. Esta feria contó con múltiples actividades paralelas y un excito rotundo.
Porque se decidió albergar un acto de estas características en el Museo CGR, pues sencillamente por atraer a un público al edificio que considera que los museos son solo mausoleos sufragados por el erario publico para satisfacer las necesidades de un sector de la población. Y esta iniciativa no la hemos inventado nosotros que somos muy doctos en la materia, cualquiera que tenga tiempo puede consultar “san Google” e informarse, sin esforzarme mucho, ni utilizar el ChatGPT. A bote pronto hemos encontrado lo siguiente: El Museo Nacional de Antropología de Madrid realiza, en ocasiones exhibiciones y charlas relacionadas con las creencias esotéricas, El museo de Ciencias Naturales en Madrid organiza eventos científicos relacionados con temas como la astrología y parapsicología, El Museo Marítimo de Barcelona ha albergado charlas y eventos sobre temas esotéricos, El museo de Historia de Barcelona ha realizado eventos relacionados con la alquimia y la historia de la magia.
Pero si realizamos una consulta en los buscadores de la red sobre que museos han realizado actividades que no tiene relación con su sacrosanta naturaleza, podemos encontrarnos que es muy habitual organizar desfiles de moda, espectáculos musicales y de danza, conferencia sobre temáticas ajenas a su actividad e incluso recepciones políticas y para rizar el rizo ágapes institucionales, Museos tan prestigiosos como: el Museo del Louvre de París, el Museo Metropolitano de Arte de New York, El Museo de Arte Moderno de New York MOMA, el Museo Británico, El Museo Reina Sofía de Madrid o el Museo Guggenheim de Bilbao no han dudado, ni les han temblado las piernas a sus directores, gerentes o ministros en propiciar estos eventos.
Otro aspecto que se ha reseñado por parte de la exviceconsejera de Educación, Cultura y Deportes y que nos afecta directamente y tiene relación con el nombramiento de Centro Regional de Fotografía consiste en que una institución museística dedicada a la figura y obra de una artista no es compatible con un Centro Regional, porque tanto su naturaleza, como sus fines son diametralmente distintos. La recuperación, conservación, restauración, el estudio y la divulgación de Patrimonio Fotográfico de la Región es una empresa tan titánica que no puede más que destinar sus energías y presupuestos a sus fines. El único encaje posible y lógico a la vez, es incorporar la obra de Cristina García Rodero a los fondos del Centro Regional pero como una fotógrafa más, sin duda la más prestigiosa, del dilatado elenco de profesionales que se prodigan y se han prodigado en nuestra Región.
Es evidente que la ciudad de Puertollano ha perdido un espacio expositivo de primer orden para satisfacer las necesidades de los artistas plásticos. En la actualidad se están estudiando alternativas con las dependencias municipales que poseemos, mientras no se cree un edificio específico dotado con todas las infraestructuras expositivas necesarias para dar satisfacción a una demanda, que no es solo la de los artistas locales, sino de una buena parte de la sociedad de Puertollano.
.
