La alcaldesa, Rosa Melchor, que desfiló en una de las filas moras, agradeció la participación y el trabajo realizado por la asociación Alkasar, y en concreto por el presidente, José Luís Carneros, por su implicación en las fiestas de Moros y Cristianos de Alcázar de San Juan. Nacieron en el polígono de Santa María hace varias décadas y este año, con el reconocimiento a los fundadores que las hicieron posible, ha quedado claro cuáles son las raíces locales.
El sábado, el desfile fue «una maravilla», expresó la primera edil, «y es que ese día éramos todos moros y cristianos, las aceras estaban llenas de gente aplaudiendo, disfrutando». Rosa Melchor expresó que una vez más la ciudad ha demostrado que la respuesta «siempre es positiva cuando hay oferta y es buena».
Para el presidente de la asociación Alkasar, esta edición ha sido «el nuevo resurgir» de la fiesta de Moros y Cristianos, que augura que «traerá muchos éxitos y alegrías a toda la ciudad de Alcázar». La valoración en este 2022 es que la celebración «ha sido todo un éxito».
Los actos centrales fueron el desfile infantil del viernes, fruto del trabajo de los colegios, y el desfile del sábado. «A pesar de que no somos muy expresivos, fue muy aplaudido por el público que acudió a verlo. Parece que con la pandemia nos hemos convertido en más empáticos y simpáticos con la gente que desfila», expresó.

Los actos empezaron con la inauguración del mercado medieval instalado en el parque Alces, lugar aplaudido por los comerciantes, tras la experiencia del pasado año. El pregón tuvo como protagonista a Sara Mota Quiralte, maestra de educación primaria y monitora de baile oriental en la Academia de Ana Rocío. Muy vinculada con la fiesta y quien desgranaba sus experiencias, desde muy pequeña con el desarrollo de los acontecimientos a través de los años en estas fiestas de Moros y Cristianos.
En este día, el mismo viernes, comenzaron los desfiles con el infantil, en el que participaron más de 150 niños y niñas. El aperitivo solidario contó con la colaboración del grupo de hosteleros La Sonrisa del Quijote, que preparó duelos y quebrantos, con los que dar la bienvenida a los grupos que llegaban de diversos municipios de Levante y de Campo de Criptana. Recaudó fondos para Cruz Roja en el Paseo de la Estación.
Gran desfile el del sábado con la Majestuosa Entrada Mora, en el que que se involucraron muchas asociaciones de la localidad. Volvieron a llenar las calles de color y de música, que también tuvo un papel muy relevante por la gran participación de bandas y charangas. Los arqueros del Torreón también celebraron en la plaza de toros una batalla de flechas.
Un acto muy entrañable resultó el homenaje a los fundadores, en la mañana del domingo. Los miembros de la asociación desfilaron en el barrio en el que se inició todo, el polígono de Santa María, hasta la casa del primer presidente, Jesús Martínez Villodre, donde le realizaron un homenaje. También estuvieron otros históricos como Antonio Moreno o Jerónimo González. Una mañana de convivencia y de recuerdo de la fiesta desde sus inicios.
Por la noche, el domingo, el desfile representó la Majestuosa Entrada Cristiana, que dio paso a la mascletá final. Un desfile muy musical y bailado que arrancó muchos aplausos del numeroso público asistente a largo de todo el recorrido.