La reducción de volumen está marcando el stock de existencias de vino y mosto en Castilla-La Mancha -y también a nivel nacional- desde el inicio de año, al registrar caídas continuadas que sin duda darán un respiro al sector a dos meses del inicio de la nueva campaña.
La tendencia aminorativa se ha confirmado en abril, según apuntan los datos del último informe económico de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE), y garantizará un buen enlace de campaña. También será un óptimo punto de partida para abrir la comercialización de la nueva producción en los mercados.
En concreto, las bodegas y cooperativas castellano-manchegas alcanzaron a cierre del cuarto mes el 40% del total del stock español de vino y mosto -50,06 millones de hectolitros-, es decir, 20,21 millones de hl, aunque por debajo del volumen acumulado a 31 de marzo, cuando fueron contabilizados 22,7 millones de hl (dos millones y medio más).
Muy lejos de estas cifras, Cataluña es la segunda región con más cantidad de vino acumulado, con algo más de 5,6 millones de hl, seguida muy de cerca por La Rioja, con 5,5 millones de hl.
De esos 20,21 millones de la producción castellano-manchega, 16,7 millones (81%) correspondieron a existencias finales de vino, y 3,5 millones a mosto sin concentrar (19%). Es una proporción similar a la registrada en los depósitos vinícolas a nivel nacional: de 50,06 millones, 46,2 millones fueron de vino (tras crecer un 9%) y 3,86 millones, de mosto (con una subida del 21,4%).
Del vino castellano-manchego, casi, 9,5 millones de hl eran de tinto, y el resto, 7,2 Mhl, de blanco.
A destilería y vinagrería
La OIVE destaca el aumento de manera destacada de la cantidad de vino enviada a destilería dentro del territorio nacional, en concreto 281.624 en la región. A nivel nacional el crecimiento interanual fue del 512%, hasta los 324.329 hl.
También aumentó el vino destinado a vinagrería en la comunidad castellano-manchega, en este caso con 29.448 hl.
Otros 1,2 millones fueron a parar a destinos interiores distintos, con el fin de ser transformados en productos vínicos.
En lo referido a salidas exteriores en el primer cuatrimestre fueron de casi 1,2 millones de hectolitros en la autonomía, más de un millón para clientes europeos, y el resto -156.803 hl. vendidos en países terceros.
De la misma manera, el Infovi recoge que de los 20,22 millones de hl existencias hasta abril en la comunidad autónoma, 16,6 Mhl de vino y 3,5 Mhl de mosto estaban en manos de productores y casi 95.000 hl entre los almacenistas.
También hay depositados 310.000 hl entre mostos concentrado, concentrado rectificado y parcialmente fermentado.
Consumo
Respecto al consumo de vino nacional repuntó por segundo mes consecutivo, situándose en los 9,14 millones de hectolitros, lo que representó una caída interanual del 13,6%, tras bajar en 1,4 millones de litros.
Estas compras en España son mayores a las registradas en febrero de 2021, cuando se alcanzó la cifra más baja, con 8,8 millones de hl y a marzo de 2021, que fue de 9,08 millones de hl.
Exportaciones
Respecto a exportaciones, según la OIVE, España exportó hasta marzo (corresponden a los últimos datos publicados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMV), 20,9 millones de hectolitros, un 0,5% más (104.483 hectolitros más). El valor de este comercio internacional fue de 2.651 millones de euros, un 0,8% a la baja (22,5 millones de euros menos).
El primer trimestre fue “bueno” para las exportaciones vitivinícolas de la mayoría de comunidades autónomas, pese a comparar aún con un periodo previo al estado de alarma por la pandemia de COVID-19.
Castilla-La Mancha sumó 16,9 millones de euros a los 606 millones ingresados entre el 1 de marzo 2020 al 28 de febrero 2021.
La región consolidó su liderato, seguida de Cataluña y La Rioja en valor y de la Comunidad Valenciana y Extremadura en volumen.
Estas cifras representaron una “reactivación del sector”, que en datos interanuales fueron cuantificados en un volumen exportado de casi 1,2 millones de hectolitros en dicho mes.
En su resumen, el OeMV destaca a Ciudad Real como provincia con más litros comercializados a nivel internacional, aunque por detrás de Barcelona en facturación.
En lo que se refiere a los ocho primeros meses de la campaña 2020/21 (agosto 2020 a marzo 2021), las exportaciones españolas de vino crecieron ya, no solo en términos de volumen (+6%), sino también en términos de valor (+2,4%). Se situaron en los 1.420,9 millones de litros (+84,6 millones) y los 1.812,6 millones de euros (+42,2 millones).
Más comercialización de vino y tranquilidad en las calles, ¿o no?
El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) en Castilla-La Mancha, Julián Morcillo, ha celebrado la situación por la que atraviesa el sector vitivinícola en la comunidad.
Las salidas de más de 2,7 millones de hectolitros en el mes de abril consolida, a su juicio, una evolución positiva en la comercialización de la producción de la actual campaña, a menos de dos meses de su cierre (el 31 de julio).
“Empezamos el año mal, ha indicado, pero parece ser que la situación está girando por circunstancias negativas en países productores directamente competentes como Francia o Italia, a causa de las heladas”.
Al parecer, la falta de uva en estos países “está tirando del vino de España y de Castilla La Mancha, y eso es lo que está recuperando las ventas, que están a un buen nivel aunque los precios todavía sean bajos”.
Con todo, Morcillo ha demandando a las administraciones –regional, nacional y europea- ayudas urgentes a corto, medio y largo plazo para el ámbito del vino, a la vez que ha dicho esperar “una recuperación de los precios”.
Por ello, ante un escenario “de un moderado optimismo”, la organización descarta por ahora movilizaciones.
“Hay sectores, ha recalcado Morillo, como los cereales en los que se han recuperado los precios y la cosecha será más que aceptable, también ha subido los valores del aceite y la leche, y tenemos encima de la mesa una serie de medidas para la mejora en la incorporación de jóvenes, y una orden de 70 millones de euros para los profesionales, las explotaciones y los agricultores profesionales”.
El líder de UPA ha destacado igualmente “la propuesta de 18 millones de euros para los olivos afectadospor la tormenta Filomena”, teniendo en cuenta que “hay que algunos hay que arrancarlos y otros cortarlos”.
No obstante, “nos preocupan los sectores ganadero y del agua”, en este último punto por la recortada campaña de riegos. UPA, según Morcillo, estará atenta a la inminente publicación de los planes de Cuenca, “que podrán ser un punto de inflexión” en su acción sindical. Podrían marcar, ha dicho, la convocatoria de “alguna protesta”.
Movilizaciones
Por su parte, Arturo Serrano, secretario técnico de Asaja Castilla-La Mancha sí ve motivos para continuar con las protestas que el pasado viernes 4 de junio retomó esta organización en la localidad de Villarrubia de los Ojos ante la problemática del agua y en defensa del regadío.
“Seguiremos poco a poco”, en colaboración con otras entidades agrarias como Cooperativas Agroalimentarias “con la que tenemos que hablar”, para redefinir un modelo de agricultura en la región “que sea sostenible pero también rentable para los agricultores”.
El objetivo es utilizar este recurso “como bien común”, es decir con una funcionalidad para todos los agentes implicados. “No se puede estar produciendo cebollas con 2.000 metros cúblicos”, ha señalado, a la vez que ha puntualizado “si hay que regar una menor extensión lo haremos pero con volúmenes suficientes”.
Para Serrano, es un control “que tiene que hacer la administración”, con el fin de seguir consolidando un sector económico “fundamental para esta región”.
También reclamarán en otros puntos de la región, como Cuenca y Guadalajara, el cumplimiento de los términos de la Ley de la Cadena Agroalimentaria, y los precios a percibir en origen por los productores.