El cazador que ha muerto este domingo en un accidente de caza en Almadén participaba en una montería en la finca Corral de Sancho, cuando ha recibido un disparo de forma accidental de otra persona. Se trata de un hombre joven, de 35 años, natural de Granada, que formaba parte del grupo de cazadores que disfrutaba de una batida con buena visibilidad y condiciones meteorológicas buenas.
El disparo provenía de otro puesto
El cadáver seguía en la finca a primera hora de esta tarde, en espera del levantamiento judicial. De la investigación se ha hecho cargo la Guardia Civil. El disparo que lo ha matado provenía de otro puesto, se investiga si ha sido un rebote o un tiro directo accidental, sobre las dos y media de la tarde.
Se detuvo a una persona por el disparo que ha quedado libre
El instituto armado ha confirmado la detención de la persona que disparó, al que se investiga por un delito de homicidio por imprudencia. Del caso se encarga el juzgado de instrucción y primera instancia de Almadén, que ha dejado en libertad provisional al arrestado, a disposición de la autoridad judicial cuando se le requiera. La Policía Judicial de la Guardia Civil ha tomado manifestación a varios testigos y este lunes seguirán con nuevas diligencias y la autopsia del cadáver.
El fallecido estaba solo en su puesto, no había otra persona doblando con él, una práctica prohibida y muy peligrosa, han explicado fuentes próximas a la investigación.
Una finca muy conocida en la comarca
La finca Corral de Sancho es de las más conocidas para la práctica de la caza mayor en la comarca de Almadén. Los dueños son de Madrid y en ella suelen cazar personas que se conocen entre sí y que repiten campaña tras campaña. Este es el primer accidente de caza mortal de la temporada 2024-2025 en la provincia de Ciudad Real, desde que se levantó la veda el pasado 8 de octubre.