Alicia Giménez, coordinadora de Acción contra la Trata de Navarra, ha reflexionado esta tarde en Ciudad Real sobre las nuevas masculinidades y el papel de los hombres en la sociedad.
De la mano del testimonio de Joy Amen Omoruyl, superviviente de origen nigeriano, activista y mediadora, Giménez se ha referido “al contexto” en el que se explota sexualmente a niñas y jóvenes vulnerables y que implica una “desigualdad de género”.
A su juicio, según ha dicho en la sesión de tarde de las II Jornadas Contra la Trata y la Prostitución, el binomio entre dominadores y explotadas puede empezar a acabarse si los hombres cuestionan y revisan su posición en la sociedad, y los roles “que han ido aprendiendo”.
Los varones “mantienen ciertos privilegios que son difícil ver, ha subrayado, y es necesario que reflexionen porque los mandatos de género del patriarcado también les afecta negativamente y necesitan pararse a pensar en lo que les hace daño”.
Por ello, campañas como #Metacha de macho, protagonizad por hombres en primera persona rompen moldes y cuestionan “qué me han enseñado y qué puedo hacer” para alcanzar la igualdad real, más allá de “la legal, formal y aparente”.
Esclavitud e incomprensión
Acción contra la Trata también trabaja con mujeres en situación de prostitución y de posible situación de trata, a veces de la mano de talleres con el proyecto ‘Women In Power’, como es el caso de Joy, quién ha contado, a través de la traducción de Giménez, cómo es la situación de tantas mujeres nigerianas y de otros países ‘abastecedores’ de mujeres explotadas como Paraguay, Rumanía, Brasil, Venezuela, Colombia, República Dominicana o China que atraviesan situación extremas y llegan a Europa a encontrarse con “esclavitud e incomprensión”.