La alcaldesa de Albaladejo, Elena Castillo, asegura que el principio de la crisis sanitaria del coronavirus, “nos costó a todos quedarnos en casa, pero, poco a poco, sí que la gente se fue concienciando al comprobar que era algo bastante importante, que no era algo pasajero”.
En declaraciones a Lanzadigital.com, la alcaldesa asegura que, en general, los casi 1.200 habitantes de la localidad reaccionaron bastante bien y “nosotros, desde el Ayuntamiento, ayudamos poniendo un servicio, con voluntarios de Protección Civil, para hacer las compras a la gente que lo necesitara y que no tuviera que salir de casa”.
Señala que era un servicio que estaba enfocado, básicamente, a los mayores, pero que también se extendió a la gente que tuviese problemas de salud.
Con la implantación de las distintas fases de desescalada, con el hecho de que los pueblos de menos de 10.000 habitantes no tuvieran franjas horarias, Castillo asegura que la población de Albaladejo “se ha ido adaptando bastante bien y no ha habido aglomeraciones”.
“Aunque no tengamos franjas horarias –dice-, la ha seguido saliendo escalonadamente, tanto a hacer deporte como a andar y, por ejemplo, las tiendas también han llevado el control para que no se acumularan clientes y se respetaran todas las medidas de seguridad”.
Ningún caso
La alcaldesa indica que, dentro la gravedad de la situación en general, “lo bueno que hemos tenido en el pueblo es que no hemos tenido ningún caso de coronavirus”.
A ello ha contribuido, considera, que las medidas de seguridad se están tomando al máximo y que la población las está respetando “muy bien”.
El hecho de que no haya habido ningún caso, remarca, ha hecho que la situación “haya llevado mejor”, en opinión de la alcaldesa.
Explica que la evolución de fases se está haciendo cumpliendo con las normas en cada momento y señala que “los bares han ido abriendo poco a poco, al igual que el resto de negocios, que se han ido incorporando también poco a poco a la actividad”.
Desinfección
Elena Castillo señala que el proceso de desinfección de calles y espacios ha contado con la colaboración especial de los agricultores del pueblo con sus tractores. “Desde el Ayuntamiento –cuenta- se dijo que se iban a desinfectar las calles y ellos, voluntariamente, se pusieron a disposición del Ayuntamiento”.
Durante este período se estado desinfectando cada tres días y ahora, de la semana pasada, añade Castillo, no se hará de forma tan continua “una vez cada 15 días o, si se puede antes, mejor”. En esta labor, también se ha contado con la ayuda de Geacam, tanto en la limpieza de edificios por fuera, como locales o la residencia de mayores y centro de salud.
Prevención
En las tareas de fabricación de elementos de protección, la alcaldesa destaca el trabajo de los cuatro talleres de confección que existen en el pueblo. “Se empezó –dice- como una iniciativa para fabricar para los habitantes del pueblo mascarillas”.
A los cuatro talles, añade, se unieron mujeres desde sus casas y, al final, se cosieron unas 30.000 mascarillas “que no solo se han distribuido en Albaladejo, sino que se han mando a hospitales de la provincia de Ciudad Real, de Jaén, a residencias, donde nos han pedido”, señala.
La alcaldesa indica que todavía se siguen fabricando mascarillas, unas 6.000 más, que volverán a ser repartidas de nuevo en el municipio.
A partir de ahí, relata Castillo, se puso en marcha un grupo de “Guerreras contra el virus”, a través de las redes sociales, que también ha fabricado gorros, calzas para los sanitarios, elementos que han tenido una distribución a nivel nacional, a centros de Barcelona, Madrid, Alicante, Sevilla o Córdova. “Gorros se pueden haber hecho 15.000 o más”, resume la alcaldesa.
Ayuntamiento
Al principio de la crisis sanitaria, indica Castillo, todos los trabajadores del Ayuntamiento empezaron a trabajar desde sus Casas “que era como nos dijeron que lo teníamos que hacer”.
Al poco tiempo, se crearon turnos y unos trabajadores lo hacían por la mañana y otros por la tarde, unos un día y el resto otros días “para que no tuvieran contacto entre ellos o que fuese mínimo, pero que la actividad del Ayuntamiento pudieran seguir funcionando”, explica la alcaldesa.
Ahora, señala, se está retomando poco a poco la actividad, siguen los turnos de la mañana y la tarde, “y la apertura al público va a ser, probablemente, la semana que viene o la siguiente, porque estamos a expensas de que nos lleguen mamparas, siempre con cita previa”.
