El Ayuntamiento va a convocar una beca de investigación para estudiar el cementerio de Alcázar de San Juan, que se considera el primer cementerio civil de España, coincidiendo con el 150 aniversario. Así lo han presentado el concejal Pablo Pichaco y el encargado Fernando Meco, quienes han destacado que es uno de los cementerios más singulares de toda la comarca, porque se aúnan diversas corrientes arquitectónicas, intelectuales y religiosas.
Además, se han organizado actividades a lo largo de todo el año como charlas, exposiciones y visitas guiadas, tras la demanda generada en la Noche del Patrimonio. La primera actividad será una visita guiada, el próximo 2 de febrero a las 11 de la mañana, para la que hay que inscribirse en la Oficina de Turismo.
Para esta efeméride se ha diseñado un logo que refleja los elementos más destacados de la instalación, como son elementos ornamentales, como ángeles, relojes de arena o cipreses. Además, sobresalen los panteones, con una gran riqueza de construcción, y que en muchos casos albergan simbología masona.
Por ello, en el logo, que ha realizado María de los Ángeles Castellanos, se ha intentado recoger todos estos elementos que describen la originalidad y esplendor de la instalación, también la última escultura realizada por Alfreda Martínez para el cementerio civil y las fosas comunes.
Un cementerio civil
El concejal ha explicado que en la inauguración del cementerio en 1850, el filósofo Tomás Tapia, pronunció un discurso donde se refería al carácter puramente civil del cementerio, una obra, no vista nunca en España, y que sería un espacio “donde descansaran las personas, sean quienes quieran, de donde quieran y como quieran”.
El concejal ha mantenido reuniones con profesionales y empresas del sector funerario (marmolistas, funerarias y aseguradoras) para proponerles el mecenazgo de la beca de investigación del cementerio que se va a convocar. Entre otras cosas se quiere estudiar cómo se enterraba en Alcázar, qué ambiente ideológico existía en el país y en Alcázar en el siglo XIX, el arte funerario en el cementerio (que está plagado de símbolos y alegorías), documentación municipal de carácter histórico, y usos y costumbres alrededor de la muerte, epitafios, cuentos y leyendas locales.
La cuantía de la beca se calcula de 2.000 euros y las bases para concursar se publicarán en la página web del ayuntamiento. El trabajo realizado quedará plasmado en una publicación que será el colofón de las celebraciones.
El concejal ha destacado la predisposición de las empresas en la colaboración. Las que han colaborado hasta el momento son: Funeraria Ortega, los seguros Santa Lucía, Ocaso y Europea, y los mármoles Carrascosa, Castellanos, Pacheco y Granimar.
Se pretende que con la beca pueda documentarse toda la historia de la instalación. El cementerio tiene una extensión de 80.000 metros cuadrados, 40.000 entradas y 10.000 unidades de enterramiento, ha explicado Meco.