En medio del ascenso que ha experimentado Vox en toda España, María Jesús Pelayo coge las riendas de la formación liderada por Santiago Abascal al frente de una candidatura que “prioriza a los alcazareños”. La que fue concejala del Partido Popular asume la cabeza de lista en las elecciones del 26 de mayo dispuesta a “recuperar los valores que siempre han caracterizado a la derecha”.
Pese a las críticas hacia el movimiento feminista que han emanado desde Vox, María Jesús Pelayo no es la única mujer que abandera las siglas de la formación en la provincia, y advierte que “la defensa de la igualdad no es ni de izquierdas ni de derechas”. Defiende la “igualdad real” sin “machacar al otro género”, una de las razones que la llevó el pasado mes de enero a abandonar el Partido Popular.
El feminismo y la memoria histórica
La candidata de Vox confiesa que está “harta de la superioridad moral de la izquierda” y de la “tibieza” del Partido Popular en algunos temas. Pelayo critica la utilización que hace el PSOE del feminismo y considera que los institutos de la mujer “solo sirven para gastar dinero”. Así pues, considera que el PSOE no promueve “medidas verdaderas” contra la violencia de género.
Las políticas de igualdad no son las únicas que causan indignación a María Jesús Pelayo, que también habla de la Ley de Memoria Histórica, que, a su juicio, “tanto ha dividido a España”. “Lo único que ha generado esta ley es odio porque a la gente le da igual cómo se llamen las calles”, señala Pelayo, que defiende “dejar a los muertos en paz”.
La prioridad serán los alcazareños
Y puesto que en las elecciones municipales lo que importa es el programa local, María Jesús Pelayo señala algunas de las líneas de su programa. La candidata destaca que la diferencia con respecto a otras formaciones es que “la prioridad de Vox son los alcazareños, las personas empadronadas en Alcázar, las que cotizan, viven y generan riqueza en Alcázar”. Eso no implica discriminación por nacimiento, de hecho, en la lista incluyen a un argentino.
Además, María Jesús Pelayo destaca que “no vamos a engañar a la gente”. “Vox es el voto seguro, porque venimos a gobernar y si nos toca estar en la oposición no nos acomodaremos”, señala. La candidata considera que el PP ha concedido cuatro años al PSOE de “luna de miel” y Rosa Melchor ha convertido el Ayuntamiento “en un chiringuito”.
De esta forma, los planes de empleo se quedarán en Alcázar y también revisarán las ayudas de los Servicios Sociales, “porque hasta ahora no se redistribuyen bien”. También prometen crear una escuela de voluntariado, reubicar el servicio de atención temprana y más plazas en los centros de capacidades diferentes.
Economía, transparencia y cultura
Entre las medidas económicas, Vox contempla bajadas de impuestos y tasas, y bonificaciones para las empresas. Pelayo defiende que “el dinero esté en mano de los ciudadanos” y “la reducción de la burocracia y los trámites en el Ayuntamiento”. También contemplan “arreglar y adecentar los polígonos industriales”, que bajo su punto de vista “están sucios y abandonados”.
La transparencia está de moda y Vox también incorpora medidas en este sentido. La formación promete hacer pública toda la información relacionada con “presupuestos, modificaciones reglamentarias y subvenciones”. Por su parte, las subvenciones dejarán de ser nominativas y saldrán a concurso.
En el siglo XXI “no es de recibo que algunos edificios municipales como el Museo Municipal no sean todavía accesibles”, por lo que Vox incorpora medidas en este sentido y habla de medidas para la promoción de la ciudad, a través la creación de un Centro de Interpretación Cervantino.
Nunca pactarán con la izquierda
A la expectativa en los próximos comicios, María Jesús Pelayo, que insiste en que su equipo está formado por “gente con mucha ilusión y amor por Alcázar”, pide el voto “a la gente de derechas, que cree en la defensa de la familia, la igualdad y la nación”, y sin adelantar su posición con respecto a pactos, confirma que nunca pactarían con la izquierda. También pone en duda la posición de Cs.