Los Broches Gastronómicos del Medio Rural, otorgados por la Academia de Gastronómica de Castilla-La Mancha, han reconocido un año más desde su creación en 2021, a cinco establecimientos de Castilla-La Mancha (uno por provincia) situados en poblaciones en zonas escasamente pobladas o en riesgo de despoblación, por su defensa de la tradición y los productos gastronómicos castellano-manchegos.
Un acto que este año se ha celebrado en Aldea del Rey en el que ha estado el presidente regional Emiliano García-Page y cuyo reconocimientos han recaído en El Segoviano, de Alcodozo (Albacete), Villa Isabelica, de Aldea del Rey (Ciudad Real), La Cabaña de Alarcón, de Alarcón (Cuenca), El rincón de la Espe, Albalate de Zorita (Guadalajara) y La Sartenilla, Las Ventas con Peña Aguilera (Toledo), destacando entre un total de 36 candidaturas registradas.

Es un premio que no tiene una dotación económica y busca paliar las consecuencias de la despoblación, así como incentivar el turismo, la cultura y el acervo gastronómico de la región y que en su cuarta edición se ha celebrado en un marco recuperado como el Palacio de Clavería.
Un enclave en el que además del presidente regional, han asistido numerosos representantes del Gobierno regional, de la Diputación provincial y del Gobierno de España, a los que se han unido los representantes municipales y del tejido económico y social de la provincia, y en el también se han reconocido cinco localidades de la región (Lezuza, Fernán Caballero, El Provencio, Brihuega y Layos) por su contribución y apoyo a la gastronomía castellanomanchega. Además ha habido en esta cuarta edición de los ‘Broches Gastronómicos’ una especial mención a las localidades de Letur y Miras tras ser afectados por la dana de octubre.
Unos reconocimientos que celebran la “excelencia culinaria del medio rural” ha manifestado el presidente de la Academia de Gastronomía, José María San Román.

Para San Román los protagonistas de la gastronomía del medio rural son los que arriesgan por ella, quienes mantienen la esencia gastronómica de Castilla-La Mancha, quienes defienden y fomentan sus productos y alimentos, quienes atesoran sus recetan y las innovan y quienes perseveran la esencia de las tradiciones culinarias de la región.
Sobre los premiados, son ejemplo de “una extraordinaria demostración de que la constancia y la tenacidad no están pasadas de moda sino que siguen edificando todavía hoy empresas altamente saludables para nuestra región en zonas despobladas”.
El apoyo del Gobierno regional a estos premios, no sólo reconoce para San Román el “talento y la dedicación de nuestros productores y cocineros, sino también fortalece nuestra identidad cultural y económica” y le ha pedido al ejecutivo regional la creación de un Instituto de Academias de Castilla-La Mancha, que integre y articule las pretensiones de las cinco corporaciones públicas que defienden la cultura regional.
Broches Gastronómicos 2024
San Román ha sido el encargado de presentar uno por uno a los premiados así ha explicado que el Segoviano, de Alcodozo, una localidad de 650 habitantes, es “perfecto” para acudir con la familia un fin de semana al ofrecer comida regional a precios “justos y asequibles” y tener como “plato estrella” el cochinillo.
Juan Francisco de la Calle, su propietario, tras recoger el premio ha agradecido la labor de su equipo de trabajo nuestro equipo de trabajo y ha asegurado que van a seguir “luchando y trabajando para que el nombre de nuestro pueblo sea cada vez más grande”.

Villa Isabelica como el Palacio de Clavería “nace de la nada”
Villa Isabelica, de Aldea del Rey, con una población de 1.573 habitantes, es un restaurante de ambiente familiar y se define “por la cosa sencilla” en la cocina a la vez que “muy refinada”. Allí se pueden degustar los mejores sabores en un “sitio espectacular”.
José Luis Naranjo ha recordado como nació a escasos 200 metros del lugar que acoge el evento “vi como se derrumbaba, era despreciado” y que gracias a la labor de los diferentes alcaldes se ha recuperado. “Me emociono porque hay cierta relación con Villa Isabelica, que nace de la nada, en honor a mi madre y a la Tía Isabelica”. Ha dado las gracias a los clientes “que ya no lo son, son amigos”, a su equipo “de cuatro personas” y a su familia.
Por su parte, en La Cabaña, de Alarcón, una localidad de unos 180 habitantes a mitad de camino entre Madrid y Valencia, cuenta con unas “preciosas vistas” y, además de “lo bien que se come”, es destino “secreto” de numerosas personalidades. “Te puedes encontrar a muchos músicos o pintores que los fines de semana van a comer allí”.
Un reconocimiento que ha sido recogido en nombre del propietario por Raúl Poveda, académico por Cuenca que ha invitado a conocer “esta zona de la Cuenca despoblada porque es muy interesante”.
En el Rincón de la Espe, Albalate de Zorita, un pueblo de 2.140 habitantes, la comida es “una un deleite para el paladar”. Se trata de un restaurante, ha indicado el presidente de la Academia de Gastronomía de Castilla-La Mancha, que “tiene una gran calidad” y está en medio de la naturaleza.
“Somos más que paisajes idílicos”
Marco Antonio Medina y Alberto Merchante han recogido este reconocimiento asegurando que abala trabajo y pasión por la cocina y han reivindicado el mundo rural “somos más que paisajes idílicos, ha llegado la hora de cambiar la imagen estereotipada”. Además han puesto en valor a la gente de los pueblos pequeños “porque son nuestro clientes y los que hacen que nuestros restaurantes vivan”

Finalmente, en La Sartenilla, Las Ventas con Peña Aguilera, una localidad de 1.120 habitantes, la comida es casera y están especializados en cocina casera y carne de caza, que se sirve en un ambiente “cálido y acogedor”. “Es uno de los sitios en caza de mejor calidad de Castilla-La Mancha”, afirmaría San Román.
Gustavo Sevillano ha sido en encargado de recoger este reconocimiento haciendo una mención especial a su madre que “aunque esta jubilada tiene que venir a ver que esta todo en orden” y a su hermano, “la otra mitad”.
Reconocimientos especiales a LETUR Y MIRA
Estos IV Broches Gastronómicos del Mundo Rural han reconocido también a las localidades de Letur, en Albacete, y Mira, en Cuenca, tras el paso de la dana del pasado mes de octubre que asoló estos municipios. El presidente de la Academia de Gastronomía ha adelantado, que tiene la intención de organizar este año un acto, en el que participen todos los cocineros y restaurantes que han obtenido Broches a lo largo de estos cuatro años, en apoyo de estos dos municipios.