Cáritas ha instalado en Almagro dos contenedores de ropa usada. La entidad sin ánimo de lucro ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento para colocar dos contenedores en la calle Camino de Daimiel. La iniciativa que se propuso a Almagro hace unos meses, recibió el visto bueno por el Consistorio almagreño al conocer las características del proyecto solidario, explica la concejal Logística, Marián Ureña.
Desde esta semana, junto al kiosco del Paseo de la Estación, los vecinos pueden depositar su ropa usada en estos contenedores rojos con el logotipo de Cáritas.
La organización de la iglesia católica española lanzó el pasado mes de abril el proyecto “Moda-re” que tiene como objetivo reciclar ropa e insertar personas. Su lema es: “reciclamos ropa, insertamos personas”. Una iniciativa de reciclado de ropa de segunda mano a nivel estatal, basada en criterios éticos y en un modelo de economía solidaria y sostenible, que genera empleo de inserción para personas en situación de exclusión social acompañadas por Cáritas. Precisamente las personas en esta situación de riesgo, del programa de inserción social de Cáritas trabajan en las tiendas distribuidas en distintas ciudades y en las plantas de gestión integral. Según los datos publicados en la web de Cáritas y en modare.org, serán más de 3.800 contenedores, mil voluntarios, 23 plantas de transferencia, 3 plantas de gestión integral, 80 puntos de donación y venta y 750 empleos generados por este nuevo proyecto.
Con la instalación de los dos contenedores en Almagro, el Ayuntamiento ha entrado a formar parte de este proyecto que también colabora con el cuidado del medio ambiente. El proyecto gestiona 30.000 toneladas de ropa usada al año y supone el ahorro de 56 millones de metros cúbicos de agua y 680 toneladas de CO2.
Re-utilizar para re-construir
La elección del nombre de la marca para esta iniciativa social no es accidental. Como señala Rubén Requena, coordinador del proyecto, “al decir moda re- queremos poner en valor la importancia de re-coger, re-utilizar o re-ciclar para re-construir, re-iniciar, re-emplear o re-vivir las biografías de todas las personas en situación social precaria a las que acompañamos”.
La apuesta de Cáritas por transformar la gestión de la ropa usada que tradicionalmente se ha venido haciendo a través de los roperos supone cambiar el concepto de esa actividad. “Dar nueva vida a la ropa y a las personas que lo necesitan –añade Rubén— a través de este proyecto significa entender que vale más de lo que cuesta, porque no es lo mismo hacer negocio con la ropa usada que hacer justicia social”, publicó Cáritas a través de su web www.caritas.es el pasado 24 de abril cuando se puso en marcha el proyecto Moda-re.
Además de favorecer la inserción laboral de los participantes en los programas sociales de Cáritas, el proyecto permite dignificar la forma en que reciben la ropa aquellas personas que necesitan vestido, que podrán hacerlo en los distintos puntos de venta como unos clientes más, pero de manera gratuita.
Innovación tecnológica
Junto a la sostenibilidad económica, moda re- ha establecido convenios con socios privados del ámbito de la moda para avanzar en la innovación tecnológica a través de proyectos de investigación orientados a la obtención de nuevas fibras textiles y derivados a partir de la ropa usada.
En el acto de presentación celebrado en Madrid participó Ana María Girón, de las Tiendas de Recuperaciones El Sembrador, un proyecto de la Fundación El Sembrador de Cáritas Albacete, quien explicó las claves al funcionamiento diario de una de las 80 tiendas repartidas por todo el territorio nacional.
“Con este modelo de economía solidaria –aseguró— conseguimos dar una nueva vida a la ropa y a las personas que lo necesitan, cuidando la máxima dignificación de la relación de ayuda y garantizando, además, la autosuficiencia económica de nuestro proyecto”.