Los distribuidores de hilo en Ciudad Real no dan abasto a la hora de abastecer a su clientela, -alimentación, restauración y hostelería-, ante la fuerte demanda veraniega, aunque hasta ahora no hay bolsas de desabastecimiento.
Portavoces de empresas de venta y reparto de hielo en la provincia aseguran que tratan de mantener proveídos a sus clientes, aunque sea con cantidades muy ajustadas. El objetivo es dar cobertura groso modo a las necesidades que les plantean sus compradores fidelizados, que también han subido el nivel de pedidos debido a las numerosas celebraciones festivas y patronales.
No hay grandes tensiones, según dicen, o al menos por debajo de las que se están registrando a nivel nacional, principalmente en provincias muy turísticas como Málaga, donde su capital tiene la feria a la vuelta de la esquina, “y están buscando hielo por todas partes”.
Las grandes superficies de la provincia, por su parte, también están recibiendo la mercancía de agua solidificada de manera puntual pero el consumo es mucho y “no damos abasto a reponer”.
Un productor de hielo: tengo abastecida a mi clientela
El productor membrillato Pedro Briones reconoce que a nivel estatal “está faltando” hielo, aunque su clientela, en la comarca manzanareña, “está abastecida”.
Explica que el origen de la crisis proviene de “la subida de la luz” de los últimos meses, que ha hecho que los productores no hayan utilizado las cámaras en invierno para guardar el hielo porque “no era rentable”. La subida de luz altísima, como en su caso, con un 327% más en la factura.
Ahora “las máquinas están fabricando de día y de noche “y no dan abasto para abastecer a las ferias y el boom de celebraciones”.
Briones se reconoce como un productor de hielo “pequeño” -1.000 kilos al día- que no deja “tirados” a sus clientes, frente a la “desesperación” de hosteleros de provincias como Málaga, desde donde le han llamado “diciéndome que me compraban toda la producción de agosto y septiembre”.
También ha recibido peticiones de Tomelloso, que ha descartado para atender a su clientela de la zona. “Los costes han subido un 60%”, se queja, y a su juicio, “los grandes deberían haber permitido un ligero incremento del producto y no hubiera habido desabastecimiento”. Ahora, “lo “pagamos los pequeños”, asegura el gerente de ‘Hielo y Gaseosas Briones’.
Cerca de ese negocio, José Molina, de ‘Hielos Molina’, gestiona en Malagón otro de distribución de hielo. Este portavoz quita hierra a la supuesta crisis de hielo, al menos, en la provincia, donde los compradores cuentan con “un chorreíllo”.
El se aprovisiona de varias fábricas, una de fuera de la provincia, y está repartiendo “sin problemas”. Por ejemplo, “he estado llevando hielo a los bares en La Pandorga de Ciudad Real, he servido al Ayuntamiento, a las tiendas y a los chinos, “y no ha faltado”. Otra cosa “son las grandes superficies y los supermercados”, que “si no llega el camión puntual o sirve cada dos días, puede surgir la alarma”.
María Ángeles Serrano, gerente de ‘Hielos Serrano’ en Almagro, apela a los medios a “no entrar en psicosis”. La distribuidora de hielo asegura que el déficit viene desde “hace mes y medio”, y se debe “al precio de la luz”. Los productores, comenta, “no han almacenado hielo con normalidad por el precio de la luz durante la épica más fría, y ahora no hay para abastecer el verano”. “Con la producción diaria no se llega”, advierte, sobre todo “cuando la demanda ha subido” por la recuperación de las fiestas sin ninguna limitación.
Con todo, la empresaria y su empleado están repartiendo el producto a sus clientes de hostelería y alimentación, a quienes avisan “de la situación”, para que ellos también racionalicen la venta y e luso del hielo. “Los tengo servidos al menos al 90%”, indica, a la vez que reconoce que “no cogeré a nuevos clientes hasta septiembre”. También llama la atención sobre la honestidad del colectivo, “que podríamos vender el hielo a precio de oro”, pero “no lo estamos haciendo”.
Supermercados
Desde el híper E Leclerc de Ciudad Real también cuentan con hielo en sus estanterías, aunque “no damos abasto a reponer”. “Nos están sirviendo”, pero “enseguida se agota”, explica Horacio Hidalgo, el director comercial del grupo en Ciudad Real.
Este portavoz apunta “al miedo” en un año en el que ha habido alertas sociales, como la del aceite, que provocó compras masivas.
Con el hielo “no tenemos límites” para los consumidores, pero “hacen acopio”.
Mercadona, por su parte, sí tiene límites a la hora de dar salida al hielo: un saco o máximo cinco bolsas por personas.
Un portavoz de la empresa en Castilla-La Mancha indica que “tenemos hielo, pero su “gran demanda” ha provocado que hayan tenido que limitar las compras. “Los proveedores no dan abasto al incremento de pedidos”, reitera.
Hosteleros
En el caso de los hosteleros, según la gerente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo, no se quejan, según su gerente, Cristina Miranda. “No hemos recibido problemas”, que “no quiere decir que no los haya”.
Hablan de esta ‘casi’ normalidad en la venta del hielo, que conocen a nivel mediático, porque en Ciudad Real el abastecimiento está cubierto. Lo que sí han apreciado, apunta Miranda, es “un incremento de su coste”, al igual que “en el resto de productos”.