Hasta cuatro veces el elenco del montaje ‘Nise, la tragedia de Inés de Castro’ tuvo que comparecer en las tablas del Teatro Municipal de Almagro a corresponder con los aplausos cerrados del público en la segunda y última función de la obra.
La directora Ana Zamora y su compañía Nao d’Amores, viejas conocidas del certamen internacional encajero, han vuelto a traer mieles escénicas, a partir de las obras ‘Nise lastimosa’ y ‘Nise laureada’, del religioso Jerónimo Bermúdez,
Se trata de una pieza que combina música e interpretación, danza y títeres, palabra y escenografía, luces y vestuario. Todo, para construir y comprender la leyenda de doña Inés (Nise en otro orden) -la joven noble que fue reina en la posteridad- en un bocado exquisito de tradición y epopeya.
La obra renacentista se centra en un hecho histórico, muy presente en los testimonios escritos y orales hispanos-lusos, y a pesar de su dramatismo triunfa el amor y redime la traición, aunque sea a través de venganza. Está ambientada en la España del siglo XIV y basada en el destino de la noble gallega Inés de Castro, cuya historia de amor con el infante Don Pedro, el hijo del rey Alfonso IV, se trunca con su asesinato por una conspiración nobiliaria, y su amado, cuando ya es rey de Portugal, la desentierra para que los felones rindan pleitesía a su cadáver tras ser entronizada como reina.
La dramaturgia es unitaria, como declara la compañía, con todos los intérpretes y músicos sobre la escena, y una escenografía que son ellos mismos y sus movimientos. Pero es la interpretación y la ambientación musical, bebedora de diferentes fuentes históricas, la que hace que sea una pieza compacta y preciosista, que lleva la mirada a cualquier época histórica en la que “el bien común” justifica humillaciones y satrapías.
Llama la atención del vestuario de los hombres, los monarcas y su corte, con trajes de perfil nórdico y rudos tejidos, en sí mismos elementos que marcan poderes y contrapoderes. Su disposición y habilidad con el verso dan realismo nada impostado a una injusticia universal, a todas las arbitrariedades que potestativamente han satanizado imperios y derribado democracias. La víctima, Irene Serrano, la única mujer en la tragedia, da la talla con una excepcional interpretación y unas rigurosas y profesionales manifestaciones vocales y corporales.
La música en directo da un valor añadido al montaje, con distintas piezas a clavecín y violonchelo, ambientadoras de la tensión dramática, que, junto a la voz de contratenor de José Hernández Pastor, ofrece toques oníricos a la tragedia.
También en RNE
También Radio Nacional de España ha querido ficcionar en la 44ª edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro esta triste historia de hace más de 600 años.
Con el título de ‘La reina muerta’, la radio pública recreó el texto en directo desde el Corral de Comedias el pasado 7 de julio con las voces de Joaquín Notario, Carolina Lapausa, Víctor Clavijo, Víctor Duplá y Camila Viyuela.
La producción de RNE para el Festival de Almagro cuenta con guion de Alfonso Latorre, realización y diseño sonoro de Mayca Aguilera y dirección de Benigno Moreno, y pretende hacer reflexionar sobre el poder, la posición social, la felicidad, el amor y el precio que hay que pagar por la honestidad.
El montaje será emitido nuevamente en ‘La sala’, el programa sobre artes escénicas de Daniel Galindo, en la madrugada del sábado 14 al domingo 15 de agosto.