Cáritas Parroquial de Almodóvar del Campo inauguró en la mañana del pasado sábado su nueva sede, ubicada en espacios cedidos por el Ayuntamiento en las antiguas instalaciones del Matadero Municipal, en la calle Triana.
El acto, sencillo pero grande por su significado y con bendición de sus distintas estancias, contó con la presencia de voluntarios, donantes, representantes de Cáritas Diocesana de Ciudad Real, de Cáritas de Puertollano y autoridades municipales y de la Parroquia.
Teresa Almodóvar, actual directora de Cáritas en la población, expresaba su alegría por la disponibilidad de esta sede, un logro anhelado que agradeció al alcalde, José Lozano, por cuanto la cesión de este lugar permitirá a la organización eclesiástica seguir con su labor de atención a las familias y personas más vulnerables del municipio.
También agradeció la presencia, entre otras personas, de Concepción Aranguren, directora de Cáritas Diocesana; Pedro Antonio Rodríguez, párroco de San José en Puertollano; Paqui Zamora, directora de Cáritas de Puertollano; y Juan Carlos Torres, párroco de Almodóvar del Campo y consiliario de Cáritas Parroquial.
La directora de Cáritas Parroquial explicó que este nuevo emplazamiento cuenta con diferentes estancias como sala de espera, sala de acogida para atender a las familias, sala de reuniones para el voluntariado y un despacho para la dirección, a la espera de que se pueda habilitar próximamente el aseo.
Sobre su equipamiento, refirió que la sede es “austera” debido a la escasez de recursos, porque la prioridad es atender a quienes más lo necesitan, agradeciendo en este punto la implicación del centenar de donantes que hacen posible el proyecto humano y caritativo.
“En esta sede se escucharán muchas historias de gente que está rota, gente sin ilusión”, afirmó Teresa, para añadir que “nosotros, los voluntarios, con amor y caridad, siguiendo el Evangelio de Jesús, les daremos todo el cariño del mundo”.
En este sentido concretó que, en Almodóvar del Campo, Cáritas se organiza en torno a un grupo de acogida, que atiende a 26 familias y ha ayudado a 175 personas con el pago de alquileres y suministros; un grupo de mayores, que acompaña a 12 personas de edad; y los grupos que se ocupan de comunicación y de administración.
El equipo que arropa a Teresa Almodóvar lo integran Tere García-Minguillán en secretaría; Ramón Cuesta y Luis Rodríguez-Borlado, en tesorería y administración; para mayores están Ramoni Cuesta, Virtu Saavedra, Inés García y Ángela Peralta; y de comunicación se ocupan Sandra Segura, Mari Carmen Clemente, Fátima Gadea y la propia Tere García-Minguillán.
La atención a quienes requieren de los servicios de Cáritas Parroquial va a ser a demanda, en función de las necesidades de cada situación y concertándose citas en todo caso a través del teléfono 643 164 567, del cual se ocupa Felipe Gómez.
El alcalde, José Lozano, agradecía a esta entidad su labor y reiteraba el compromiso del Ayuntamiento hacia las personas más vulnerables, indicando que la cesión del espacio es otra muestra del apoyo del pueblo de Almodóvar del Campo a Cáritas.
El primer edil valoró el trabajo desinteresado que hace el voluntariado de la organización, así como las aportaciones de donantes al proyecto, agradeciendo también el interés de Cáritas Diocesana y de la organización en Puertollano, así como del propio párroco.
Concepción Aranguren, directora de Cáritas Diocesana, se mostró emocionada por su parte ante la inauguración del local y agradeció las palabras de la presentadora, Tere García-Minguillán, por destacar su trayectoria y compromiso con los más desfavorecidos.
Aranguren afirmó que su labor en Cáritas está motivada por su fe y su deseo de ayudar a los más necesitados, de igual manera que lo hacen todas las personas que en las distintas delegaciones dan vida a esta acción caritativa de la Iglesia católica.
Finalmente, Juan Carlos Torres, párroco de Almodóvar del Campo y consiliario de Cáritas Parroquial, encargado de dirigir la oración de bendición, felicitó también a los voluntarios y les animó a continuar su labor en la nueva sede.
Agradeció el apoyo de Cáritas Diocesana y del Ayuntamiento y reflexionó sobre el misterio de la encarnación y la importancia de la ayuda a los necesitados como un acto de fe, al referir que “todo ser humano que sufre es un signo del Dios de la cruz”.
Referir asimismo que durante las horas vespertinas del mismo sábado, la organización celebró unas jornadas de puertas abiertas con el fin de compartir la buena nueva de estas dependencias para toda persona que tuvo a bien conocerlas.